
Conoce cómo se calculan las cuotas del impuesto y las bonificaciones establecidas.
Este jueves, 7 de noviembre, el Ayuntamiento de Pinto ha celebrado un pleno extraordinario para debatir la aprobación inicial de la ordenanza reguladora de la tasa de basuras. Su visto bueno había sido pospuesto en la sesión ordinaria de octubre para estudiar las enmiendas presentadas al documento. La propuesta de Partido Popular y Pinto Avanza ha salido finalmente adelante con la abstención de Unidas Pinto-Podemos y el rechazo de PSOE y Vox.
A diferencia del resto de municipios, la ordenanza pinteña no cuenta con un rango de cuotas, sino fórmulas matemáticas, que los pagos se calculan en función del número y tipología de inmuebles afectados. El importe final se ha establecido en función de una cuota fija que diferencia entre edificaciones del caso urbano destinadas a uso residencial, establecimientos comerciales y de ocio y hostelería y el resto. También tiene en cuenta una cuota variable resultante del valor catastral de los inmuebles y del volumen de residuos generados.
La ordenanza cuenta con varias aportaciones de PSOE y Unidas Pinto-Podemos. Las enmiendas de la confluencia, de hecho, han permitido establecer bonificaciones que el Gobierno había emplazado al momento en el que “las circunstancias lo permitan”. Así, las personas y familias en riesgo de exclusión social podrán reducir un 90% de la cuota fija de la tasa siempre que lo soliciten previamente.
También se contempla una bonificación de hasta el 60% de la cuota variable para fomentar “buenas prácticas medioambientales”. Los descuentos se podrán acumular por utilizar el Punto Limpio al menos cuatro veces durante el año (-10%); adherirse a sistemas de compostaje comunitario (-5%); y reciclar de forma habitual residuos orgánicos (-15%), envases ligeros (-15%), papel y cartón (-10%) y vidrio (-5%). Este último punto, sin embargo, está ligado a la instalación de contenedores inteligentes.
Los pinteños comenzarán a pagar la nueva tasa de basuras desde el 1 de enero de 2025 siempre que la ordenanza aprobada supere el periodo de exposición pública.
Debate político
“El mal tratamiento de los residuos y el modelo anticuado de gestión que tenemos en los municipios de la Comunidad de Madrid hacen que ahora nos toque pagar una elevada factura”, ha declarado el concejal de Unidas Pinto-Podemos, Isaac López. Desde la formación han destacado que sus enmiendas han permitido establecer bonificaciones y una tasa más progresiva. Sin embargo, consideran que el Gobierno debería haber llevado a cabo un mejor estudio de campo, motivo por el que no han votado a favor de la propuesta.
Vox ha utilizado su intervención para cargar contra el PP, al que culpa de la existencia de esta tasa porque era quien gobernaba en la Unión Europea cuando se aprobó y, posteriormente, se abstuvo durante su tramitación en el Congreso de los Diputados. A nivel local, su portavoz, Miguel Maldonado, también ha echado en cara al Ejecutivo que no haya agotado el plazo máximo que contempla la ley para aprobar la tasa, el 10 de abril de 2025, y que tampoco se haya compensado este nuevo gravamen con una bajada del IBI.
Como es habitual, las palabras más gruesas han partido de Más Madrid. “No creen en el medioambiente ni en el bienestar de la ciudadanía y ni mucho menos en la economía de los pinteños -ha dicho su portavoz, Elena Ancos-. Sólo quieren hacer caja y por eso quieren aplicar esta ordenanza de forma precipitada”. En su opinión, se trata de una “tasa oscura” porque no refleja ni el coste del servicio ni que lo pagarán los vecinos, y adolece de otros problemas como una mayor diferenciación por tipo de negocios. “No se escuden en los técnicos municipales su cobardía y todos sus fallos porque esto se trata de una decisión política”.
Desde el PSOE han coincidió en varios puntos con sus predecesores. El partido considera necesario saber tanto el coste real del servicio de recogida como el de las bonificaciones para saber si la tasa establecida cumple la ley. También cree que su aprobación se podría haber pospuesto al año que viene para empezar a cobrar la tasa en 2026, lo que hubiera permitido además bajar el IBI o el ICIO como han hecho otros municipios madrileños como Móstoles o Torrejón de Ardoz. Su portavoz, Diego Ortiz, ha justificado además su voto en contra en que “su socio prioritario, Vox, no les va a apoyar y ahora intentan lanzar la pelota al resto”.
Desde el Gobierno de coalición, por su parte, han negado buena parte de los argumentos de la oposición y, especialmente, de Más Madrid y Vox, a los que ha acusado de buscar “emponzoñar la vida política municipal”. El Ejecutivo considera que la ley es clara al establecer que la tasa debe entrar en vigor antes del último día establecido y, ante las propuestas de bajada del resto de impuestos, ha recordado que está abierto a ello “si esa bajada no pone en riesgo la salud financiera del Ayuntamiento”.
Para el portavoz del Gobierno y líder de Pinto Avanza, Fernando González, la tasa “va a ser positiva para las arcas municipales y va a redundar en mejores servicios públicos”. Desde el PP, sin embargo, se han mostrado en contra del modelo de aplicación elegido por el Gobierno central porque "es injusto obligar a las administraciones locales a aplicar una tasa a sus vecinos en estos términos, siendo contrario al principio de autonomía local”. Sin embargo, el alcalde, Salomón Aguado, defiende que se ha trabajado para que “afecte lo menos posible a los bolsillos de nuestros vecinos” y Pinto se convierta en “uno de los municipios más respetuosos con el medioambiente”.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.144