Los últimos rebrotes de coronavirus han estado asociados mayoritariamente a la población joven y desde muchos sectores se les acusa de tener comportamientos irresponsables.
En los últimos días las informaciones sobre los rebrotes que se están dando a lo largo y ancho del país ponen el foco especialmente en los contagios relacionados con el ocio nocturno. Discotecas, pubs, botellones o fiestas al aire libre abren informativos señalando a los jóvenes como responsables del nuevo aumento de casos.
Hace apenas una semana, la propia Policía Local de Pinto colgaba en sus redes sociales la imagen de un macrobotellón en uno de los polígonos del municipio y añadiendo a dicha foto un texto que llamaba a quienes en él estaban participando “egoístas”.
En los diferentes municipios del Sur de Madrid se han tomado ya medidas para tratar de atajar estas fiestas nocturnas, en algunos casos con más éxito que en otros. Sin embargo, los protagonistas de estas fiestas tienen una perspectiva muy distinta de lo que está sucediendo con el ocio nocturno.
ð#ViernesNoche
-Controlamos zonas que son objeto de concentración de personas y de práctica de botellón.
-La fotografÃa muestra la intervención en el polÃgono industrial âLa Posturaâ
ðLa zona queda limpia.
ðRealizamos prueba de alcoholemia a conductores/as (antes de conducir). pic.twitter.com/FMACdDAyfRâ PolicÃa Local Valdemoro (@policiavaldmoro) July 25, 2020
ZIGZAGdigital ha hablado con varios grupos de jóvenes que el pasado sábado se reunieron en un polígono de Ciempozuelos y cuya visión de estos encuentros dista mucho de la que tienen los adultos.
Sara*, asegura que en los botellones en los que ella ha estado desde la finalización del estado de alarma “se han respetado las normas”. “Nos juntamos solo con amigas que habitualmente veo en mi casa, en una terraza de un bar o con las que me voy de vacaciones, no nos mezclamos con otros grupos y procuramos estar separados unos de otros, así que no entiendo la diferencia con estar dentro de un bar”.
Para Carla, el reunirse de este modo es de las pocas opciones de ocio que les quedan este verano. “La mayoría de discotecas están cerradas, no podemos estar siempre en bares porque sería muy caro y en casa de nuestros padres, molestamos. Aquí por lo menos estamos alejadas del pueblo y al aire libre”.
La COVID-19 ha cancelado la mayoría de planes de ocio para jóvenes. No hay festivales de música, se han cancelado las fiestas patronales y en algunos municipios, como es el caso de Pinto, no hay ninguna actividad cultural programada para la época estival en la que puedan invertir su tiempo.
En este grupo de jóvenes, algunas llegan a afirmar que consideran más seguras las discotecas que los bares. “En las terrazas no hay control sobre el aforo ni las distancias entre mesas. Ahora mismo en las discotecas que están abiertas, todo el mundo tiene que estar en el espacio que ha reservado y no puede moverse a otras zonas. Te toman la temperatura al entrar y al salir, hay gel hidroalcohólico y tienes que llevar la mascarilla puesta”, sostiene una de las jóvenes.
Afirman sentirse criminalizadas por los adultos “cuando ellos en muchas ocasiones hacen las cosas mucho peor que nosotros” y aseguran que son conscientes del riesgo que hay. “No creo que no podamos contagiarnos por ser jóvenes, al contrario, creo que acabaremos cogiéndolo todos antes o después”, sostiene Helena. "Hacemos lo que nos dicen: no somos más de 15, estamos al aire libre y no nos relacionamos con otros grupos".
En cuanto al incidente ocurrido en Pinto la pasada semana, donde decenas de jóvenes se aglomeraban en el polígono de El Cascajal, las jóvenes, que admiten que estuvieron allí, reconocen que ha sido en el que más descontrol ha habido por la cantidad de gente que había en un espacio reducido y que este tipo de eventos masivos sí les parecen mal. “Cuando llegamos nosotras estábamos al lado de nuestro coche, pero poco a poco fueron viniendo más y más coches y es verdad que había un exceso de gente y tuvo que venir la policía para que la gente se fuese”.
Las visitas de los agentes a este tipo de aglomeraciones espontáneas se están convirtiendo en un habitual de la zona Sur de Madrid. De hecho, en Valdemoro, sostiene una joven de la localidad, han logrado que “ya no vaya casi nadie porque te multan seguro”.
En el caso de Ciempozuelos, este pasado fin de semana ha sido el quinto en el que la Concejalía de Seguridad ha implementado un dispositivo de seguridad para atajar el problema de los botellones. Para ello, informan desde el Consistorio, han acordonado la zona de los campos de fútbol, los parques de la localidad y han contado con la presencia de la Unidad Canina para el desalojo de botellones masivos.
El equipo de ZIGZAGdigital pudo comprobar por sí mismo que este pasado fin de semana, las zonas habituales de botellón de los citados municipios estaban despejadas a altas horas de la madrugada y que los pocos grupos de jóvenes que estaban en los polígonos lo hacían muy alejados unos de otros, por lo que los dispositivos establecidos por los diferentes Ayuntamientos y las campañas de concienciación parecen estar haciendo mella entre los más jóvenes.
*Todos los nombres del reportaje son ficticios.


















Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.99