Ganemos Pinto asegura ahora que buscará "una solución habitacional" a MDG

El pasado mes de marzo, MDG, madre soltera, en paro y a cargo de tres hijos -uno de ellos menor y otro con una enfermedad grave-, recibió una carta en su buzón en la que le avisaban que el Ayuntamiento de Pinto rescindía su contrato de alquiler en una vivienda municipal donde la familia se aloja desde 2014, debiendo abandonar su casa el próximo 14 de abril.

Ayer, tras la publicación en Zigzag de esta decisión del equipo de gobierno el alcalde Rafael Sánchez salió, a través de las redes sociales, a "desmentir" la información vertida por Zigzag y declarar que "no se echará a la familia de su casa sin haberles buscado una solución habitacional".

Unas declaraciones que llegan tarde y que no fueron pronunciadas por el edil durante las conversaciones mantenidas con MDG. De hecho la pinteña se veía "en la calle" y, antes de explicar su delicada situación a la prensa, se puso en contacto con el gobierno pinteño para buscar una solución que, a menos de diez días de que expiará su contrato, no llegaba.

Ahora, el Ejecutivo dice que "jamás" pensó en el desahucio, simplemente "no podíamos renovar el contrato de alquiler debido a sus impagos". Desde 2014 MDG ha ido pagando "lo que ha podido" de los 300 euros mensuales que cuesta el alquiler debido a su precaria situación, reconociendo formalmente su deuda con el consistorio y habiendo avisado al anterior gobierno de su situación.

La realidad es que a sólo un mes de que terminara el contrato de alquiler, Ganemos Pinto envió una fría carta a MDC diciéndola que debía marcharse "o recurrir", sin más explicaciones ni soluciones habitacionales. “No prorrogar el contrato de arrendamiento de la vivienda firmado con fecha 14 de abril de 2014 con MDC y en consecuencia dar por extinguidos el mismo con esa fecha”, se leía en la carta de la pinteña que también la invitaba a interponer un “recurso de reposición, ante la Junta de Gobierno Local de este Ayuntamiento, previo al contencioso administrativo en el plazo de un mes o bien recurso contencioso administrativo ante los juzgados en el plazo de dos meses a partir del día siguiente en que tenga lugar la notificación”.

"La carta del 14 de abril dice que no se le va a renovar el contrato por falta de pago, en ningún caso es una orden de desahucio ni nada parecido", espetó en alcalde después de llamar "falso" y "mentiroso" a Zigzag y acusarle de "acoso y derribo" al gobierno. Sin embargo el edil siguió sin aclarar cuál será la solución habitacional de MDG ya que ésta no pasaría necesariamente por continuar en la casa donde ella y sus tres hijos llevan viviendo durante tres años: “veremos la posibilidad de buscarle otra vivienda municipal si cumple los requisitos”. Como ya explicó ayer Zigzag, MDG tiene una deuda contraída con el Ayuntamiento que le impide cumplir esos “requisitos”.

Y es que Ganemos Pinto ha seguido el mismo 'modus operandi' que con los cinco ancianos de la residencia Dolores Soria, mandado primero la 'notificación de desahucio' a la parte afectada y buscando a posteriori una solución. En el caso de los ancianos fue la Oposición la que dio con la mejor salida al problema -aunque no tuvo que llevarse a cabo porque la Justicia echó para atrás la decisión del Ejecutivo- y en este, de momento, el Gobierno se ha limitado a realizar una propuesta imposible de llevar a cabo.

Para lo que sí ha servido todo este entuerto es para que el Ayuntamiento establezca un Plan especial de pagos con el resto de inquilinos de las viviendas sociales de Pinto -muchos también en situación de impago. De esta forma podrán saldar sus deudas y renovar sus respectivos contratos antes de que expire el plazo fijado, un privilegio que hubiera evitado a MDG toda esta situación.