El comité de empresa del Ayuntamiento de Pinto insta a los trabajadores a expresar su “malestar” con el Gobierno

La relación de Ganemos Pinto con los trabajadores del Ayuntamiento de Pinto no parece pasar por su mejor momento. Así lo atestigua el último comunicado del comité de empresa, con fecha del 13 de diciembre, en el que insiste en la “dejadez y abandono por parte del equipo de gobierno en todo aquello que tenga que ver con nuestras reivindicaciones y promesas que nos hicieron al comienzo de la legislatura”. Tal es así, que los representantes de los trabajadores municipales consideran que hay problemas que “lejos de solucionarse se están enquistando cada vez más”.

El comité empresa asegura que el Ejecutivo ha dado la callada por respuesta a varias peticiones, sobre las que no han recibido respuesta alguna desde hace varios meses. Cuando sólo quedan unos días para terminar el año los trabajadores no cuentan con un calendario laboral para 2018 ni una organización de servicios que permita seguir elaborando la nueva Relación de Puestos de Trabajo, que a su vez estaría demorando otras demandas de la plantilla.

Del mismo modo los sindicatos han revelado que Ganemos Pinto ha gastado “por un error de cálculo” la dotación presupuestaria para cubrir dos plazas de Policía Local al realizar una transferencia de crédito, aunque se niega a señalar a qué partida corresponde. El comunicado también denuncia la intención del Gobierno de cubrir la futura baja por jubilación del jefe de negociado de Secretaría mediante un nombramiento “a dedo”. “Este tipo de actitudes contravienen el compromiso que se firmó recientemente de estabilidad en el empleo, y la voluntad manifestada de que se efectúen procesos de igualdad, mérito y capacidad –señalan los sindicatos-. ¿Dónde queda la promoción interna de las personas que desarrollan esos trabajos y no se les reconoce?”

Por todo ello el comité de empresa ha decidido manifestar su “malestar” por la situación y no participará en la fiesta de Navidad que ha organizado el Ejecutivo para los empleados municiaples el próximo 22 de diciembre en la finca Sika. Una protesta que esperan sea respaldada por el resto de los trabajadores porque consideran que “la situaciones laborales no parecen ser evidentes hasta que no se plasman de alguna manera”. Los últimos ejemplos han sido el encierro que protagonizaron los sindicatos el pasado mes de marzo -posteriormente negado tras llegar a un acuerdo-, o las quejas por los fallos de climatización en la biblioteca Javier Lapeña que fueron duramente criticadas por el concejal de Recursos Humanos Daniel Santacruz por formar parte de una “campaña orquestada”.