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Cierra la ludoteca municipal del barrio de La Cristina de Pinto

Raúl Martos Martínez Ver comentarios 1 Viernes, 19 de Septiembre de 2025 Tiempo de lectura:
Padres y niños en el parque Fúster de Pinto.Padres y niños en el parque Fúster de Pinto.

El Ayuntamiento de Pinto ha decidido unificar los servicios en la biblioteca Javier Lapeña del barrio de La Tenería. Las familias piden su reapertura.

El proyecto de construcción de un parking subterráneo en la zona centro de Pinto está provocando una cascada de cambios. El aparcamiento se levantará en el pleno parque Egido, lo que supondrá la salida de la asociación de personas con discapacidad de Pinto (AMP) del edificio municipal de la calle Egido de la Fuente, 15. Su nueva sede será el Centro Miguel Ángel Blanco, lo que obligará a mover a las entidades que trabajaban allí y a reorganizar servicios como las ludotecas municipales.

 

Desde este mismo curso Pinto ha pasado a contar con una única ludoteca, la de la biblioteca Javier Lapeña del barrio de La Tenería. Las familias pudieron incluso formalizar su inscripción en junio también para la ludoteca y pequeteca que había en el Centro Miguel Ángel Blanco, en pleno parque Fúster del barrio de La Cristina, pero a principios de septiembre fueron conociendo a cuentagotas que no abriría. Desde el Gobierno ofrecieron dos alternativas, cambiarse a la ludoteca de La Tenería o inscribir a sus hijos en la Escuela Infantil Triángulo.

 

“No entendemos por qué se prescinde de un espacio ya preparado y que ha demostrado ser útil, querido y valorado por los vecinos”, se quejan las familias. Las madres y padres se han organizado para pedir al Ayuntamiento de Pinto que restablezca el servicio, que antes del inicio del curso ya contaba con 14 inscritos en la pequeteca matinal al margen de los del servicio de tarde. Consideran que la decisión es un desagravio para el barrio de La Cristina, más cuando justo en frente del parque Fúster se está construyendo en estos momentos una nueva urbanización con más de 100 viviendas.

 

En su opinión, el cierre “es una muestra de la falta de consideración hacia las familias y hacia el derecho de los niños a contar con servicios de calidad en su propio barrio”. Temen que la decisión suponga el despido de personal, una cuestión ante la que fuentes municipales se limitan a señalar que “la empresa contrata al personal del servicio en función de la ratio de los niños de la ludoteca”. Desde el Gobierno, en cualquier caso, recuerdan que la medida responde al cambio de sede de la AMP, “una decisión consensuada con la propia asociación y que han celebrado, ya que les permitirá dar nuevos servicios a más usuarios”. Además, señalan, “el antiguo edificio en el que se encontraban arrastraba problemas en su infraestructura”.

 

Frente al temor de los padres a quedarse sin plaza, el Ejecutivo pinteño garantiza que “todas las familias que se venían beneficiándose del servicio de van a poder seguir haciéndolo en la biblioteca Javier Lapeña”. Unas instalaciones que las familias descontentas también rechazan por los recientes problemas de climatización y en el ascensor, que no funciona desde hace meses y cuyo arreglo también ha sido reclamado por la Asociación Vecinal La Tenería. “La pérdida de la ludoteca del Fúster nos obliga a desplazarnos a centros menos adecuados y contribuye a la desigualdad entre barrios”.

 

Fuentes municipales aseguran que los problemas de climatización ya se han solucionado y que, a pesar de que dado problemas desde su construcción, la decisión de municipalizar su mantenimiento propiciará que “todos estos problemas sean parte del pasado”. En cuanto al ascensor, explican que a principios de septiembre se formalizó un contrato de 22.000 euros para que una empresa lleve a cabo la sustitución de las cintas de tracción. La empresa actualmente está a la espera del suministro del material para proceder al arreglo.

 

Pero más allá de los problemas que puedan tener las instalaciones de la biblioteca Javier Lapeña, las familias advierten que “muchos padres y abuelos no disponemos de vehículo propio para realizar los desplazamientos diarios, lo que complica enormemente la conciliación familiar”. Por ello, prometen seguir dando guerra hasta recuperar un “servicio municipal único en la zona para el primer ciclo de Educación Infantil y que ha sido fundamental para la conciliación de las familias y el bienestar de nuestros hijos”.

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