
El centro atiende a actualmente a 240 familias, a las que ofrece carros de la compra, comida cocinada, enseres para bebés y juguetes.
La solidaridad del Centro Social Vicente Ferrer no se ha ido de vacaciones tras la llegada del verano. Y es que el centro continúa prestando apoyo a las personas del municipio que se encuentran en situación de desamparo social. Su plantilla, gestionada por el Ayuntamiento y dependiente del Área de Servicios Sociales, selecciona y entrega alimentos no perecederos a las familias que más lo necesitan.
Además, la Asociación Avalso sigue desarrollando el proyecto “Comida cocinada”, por el que elabora menús diarios en las cocinas del centro social y hace entrega a la despensa de los excedentes que recibe como asociación. La recaudación se completa con lo donado por vecinos, centros educativos, clubes, asociaciones y empresas, que hacen posible que el centro siga realizando estas entregas.
Este año, el Vicente Ferrer también cuenta con la colaboración del Fondo de Ayuda Europea a las Personas más Desfavorecidas (FEAD), por lo que recibe productos del Banco de Alimentos. En la actualidad, el centro atienda a 240 familias derivadas de los Servicios Sociales que acuden mensualmente a por su carrito de la compra. También se siguen repartiendo enseres para bebés y juguetes.

















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