La Comunidad de Madrid afirma que las obras de drenaje no secarán los humedales de Ciempozuelos

Desde que en julio varias asociaciones ecologistas iniciasen una petición en la plataforma Change.org para salvar los humedales de Soto Gutiérrez, situados en el municipio de Ciempozuelos, numerosas personalidades han mostrado su preocupación. El congresista y portavoz de Equo, Juan López Uralde, el diputado de Más Madrid, Alejandro Sánchez, o dirigentes de Ecologistas en Acción como Santiago Martín y el fundador de la organización, Theo Oberhuber, han pedido detener las obras que podrían secar a la que se conoce como ‘La pequeña Doñana de Madrid’.

El humedal, situado en el Parque Regional del Sureste, se ha convertido en un pequeño santuario en el que se encuentran todo tipo de aves como águilas, buitres, cigüeñas o garzas desde que hace 20 años dejase de funcionar una mina cercana. Según cuenta ABC, los propietarios recibieron en 2001 permiso para dedicar parte del terreno a otros usos ya que el área tiene una calificación medioambiental D. Es decir, la zona cuenta con “un menor nivel de protección, permitiéndose actividades ligadas a aprovechamientos agropecuarios o equinos”.

Los dueños están llevando un plan de restauración de la antigua explotación minera. Desde la Concejalía de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid explican que las obras afectan a un extremo de la finca como “consecuencia de las aguas que se reciben por los riegos por inundación derivado del regadío de maíz”. Los trabajos, en cualquier caso, “no han afectado a las aves” porque “al drenarse, una mínima parte de ese entorno, se ha quedado seca, pero es algo puntual y no afecta a la parte central o la parte querenciosa para las aves”.

Desde el Gobierno regional, en cualquier caso, se han comprometido a hacer realizar “un seguimiento exhaustivo” y han recordado al promotor que “no se podrá ejecutar ningún relleno de tierras sin autorización expresa”.