Nuevo gobierno en Pinto

Lo que era un secreto a voces desde octubre ya es una realidad: PSOE, Unidas Pinto y Podemos gobernarán en coalición el Ayuntamiento de Pinto. La reacción vecinal, mayoritariamente contraria a este acuerdo a poco que uno se moleste en escuchar el sentir de la calle, colisiona con el interés manifestado por las tres fuerzas políticas de llegar a un acuerdo presupuestario y asegurar una mayoría en el pleno que aporte estabilidad a la acción del gobierno lo que queda de legislatura. Pero antes de hablar de a dónde vamos recordemos de dónde venimos.

Rafael Sánchez, portavoz de Unidas Pinto (aunque no estén nada unidas), anterior portavoz de Ganemos Pinto (aunque no ganó) y fundador del Movimiento de Izquierda Alternativa (y de alternativa al final aportó más bien poco), se ha presentado 4 veces a la alcaldía de Pinto. Siempre ha colisionado con el PSOE y con quien le ha rodeado. Hay un dato que resulta esclarecedor: de sus 6 concejales de gobierno, que acabó hace menos de dos años, no le queda ninguno en activo. Podrían sobrevivir uno o dos y ya sería llamativo, pero no. Ninguno. Como 6 han sido los años que ha necesitado para llegar a un acuerdo, siquiera presupuestario, con el PSOE. El debate sobre si fue el peor alcalde de la historia de Pinto, competición en la que el actual alcalde, Diego Ortiz, está presentando una ardua batalla, es algo sobre lo que los vecinos dictaron sentencia. Rafael Sánchez es el alcalde que se ha presentado por primera vez a la reelección y que ha obtenido, con mucha diferencia, el peor resultado electoral de la historia de Pinto: tercera posición y un raquítico 13,93% de los votos emitidos. Por encima de la opinión, la estadística.

Sobre Isaac López, portavoz de Podemos, poco se puede decir más allá de que hace un año afirmaba que los cargos de confianza eran "demasiados y con unos sueldos muy altos, y por ese motivo no apoyamos ese acuerdo ni ningún otro porque nos negamos en rotundo". Ahora vemos que eran demasiados y con sueldos altos si estos eran para los demás, dado que con el presente acuerdo de gobierno gestionará las áreas de educación, formación, empleo, juventud e infancia y contratará un nuevo cargo de confianza. Que se pusiese morado quizá sería excesivo, pero algo colorado sería hasta higiénico.

El nuevo acuerdo de gobierno tendrá una consecuencia positiva para Pinto: contaremos con presupuestos nuevos, actuales y aprobados por primera vez en 6 años. Tendremos que conceder un tiempo para que el nuevo gobierno coja vuelo o confirme la caída de Diego Ortiz. Pero a priori los mimbres de este cesto compuesto por un gobierno a la deriva, el ex-alcalde menos votado y la veleta morada no ofrecen las mejores esperanzas. Ojalá me equivoque y lo tenga que escribir. Por el momento, y deseando rectificar, esta es mi opinión del nuevo gobierno en Pinto.