Más de 1.000 ancianos han fallecido en residencias de Madrid desde el inicio del coronavirus

Desde el 1 de marzo hasta el 25 de este mismo mes han fallecido en las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid un total de 1.065 personas. 760 murieron en los propios centros, mientras que las restantes 305 lo hicieron en distintos hospitales de la región. Son las cifras del primer balance oficial que ha ofrecido la Consejería de Políticas Sociales desde que empezase la crisis del coronavirus.

Los datos, sin embargo, son imprecisos, reconocen desde la Comunidad de Madrid, ya que es “imposible saber con exactitud el daño que el virus ha causado en las residencias porque muchos fallecidos fueron enterrados o incinerados sin ser sometidos a pruebas diagnósticas”, reconocen los inspectores de la Consejería.

Un ejemplo de ello ha sido la residencia Monte Hermoso de Madrid, donde murieron 19 ancianos la pasada semana, que fueron catalogados como posibles casos, pero no hubo confirmación. El informe, por tanto, siembra muchas dudas sobre cuál ha sido la incidencia real del virus en las residencias madrileñas.

¿En qué residencias? | Fuentes del Ejecutivo, de hecho, han afirmado que “en marzo del año pasado murieron 1.000 ancianos en las residencias por causas naturales” y que estas defunciones representan “apenas el 2% de todos los internos de la Comunidad” ya que actualmente, existen en Madrid 52.031 personas mayores internas en las 475 residencias de la región.

El informe, elaborado por los inspectores del Centro de Control de Calidad e Inspeccion (CIRA), tampoco detalla en qué residencias concretas, ni de qué municipios, se han producido estas muertes, pero si revela que actualmente hay 655 usuarios de residencias positivos en COVID-19, de los cuales 388 están hospitalizados. En los municipios de nuestro entorno, se sabe que ha habido fallecidos por coronavirus en las residencias de Ciempozuelos Casaquinta y en Valdemoro en Casablanca, aunque por el momento el resto de centros de mayores no han revelado más datos. 

Por seguridad para estas infraestructuras, donde reside la población más vulnerable, en estos momentos hay 14.894 ancianos aislados de los cuales 4.156 presentan algún síntoma y 10.738 son actualmente asintomáticos.

La investigación ha sido duramente criticada por la oposición que ha reprobado la opacidad de la Consejería. A esta incertidumbre en los datos se une la escasez de material con la que cuentan las residencias, donde faltan guantes, batas, mascarillas, test de diagnóstico, enfermeros y médicos, según el documento difundido por la Consejería de Políticas Sociales.

Plan de choque | Tras dar a conocer el informe, la Comunidad ha anunciado que pondrá en marcha un plan de choque en el cual Sanidad actuará como mando único en el que la consejería de Políticas Sociales está preparando planes para intervenir la gestión de residencias privadas en situación crítica.

La Comunidad ha explicado que analizará individualmente cada residencia y actuará en consecuencia en función de las diferentes necesidades que se detecten.

El plan contempla también la posibilidad de que los mayores que no estén contagiados “sean trasladados a hoteles cercanos, a casas de familiares si así lo prefieren, o incluso a camas del macro hospital de Ifema”, han informado desde el Ejecutivo, que se reúne hoy para concretar estas acciones.