Mientras tanto, la campaña contra el cambio de gestión del gimnasio Pintogym ha superado las 3.000 firmas.
El Ayuntamiento de Pinto ha anunciado que se han cubierto las 800 plazas del nuevo abono deportivo, que ya había sido ampliado ante “la gran demanda”, por lo que se ha abierto la lista de espera para el servicio. Paralelamente la campaña contra el cambio de gestión del gimnasio Pintogym, promovida por antiguos usuarios descontentos, ha superado las 3.000 firmas para reclamar la vuelta de José Aguado y su equipo.
El grupo insiste en que, a pesar de los números, las salas siguen encontrándose vacías buena parte del día y critican el estado de las instalaciones. “Este es el plan de modernización que venden”, ironizan adjuntando una de las dos imágenes que ilustran esta noticia. En cualquier caso la campaña continuará en febrero. Las próximas recogidas de firmas tendrán lugar el día 2 en la estación de Cercanías, el día 4 en el pabellón Sandra Aguilar, el día 10 en el polideportivo Alberto Contador, el día 18 en el centro comercial Plaza Éboli y el día 24 en el Mercadona del barrio de La Tenería.
Luis Osorio | Viernes, 02 de Febrero de 2018 a las 10:40:26 horas
Pues lo de ayer fue de lástima. Me cometa un colega, que está yendo a entrenar, que la semana pasada bajó un chico en silla de ruedas, con discapacidad e inmovilizado de cintura para abajo, y estuvo atendido mientras les fue posible a los monitores, porque estando allí algún usuario más reclamaba su atención. Pues bien, él estuvo asistiendo al chaval el tiempo que permaneció en sala. Durante ese tiempo hay un monitor para ambas salas y los otros monitores destinados a dirigir clases colectivas.
Pero lo de ayer fue de traca. Volvió a bajar este chico y el monitor le estuvo atendiendo hasta que tuvo que marchar para atender la clase colectiva que le tocaba impartir. Otro monitor en otra de las clases colectivas y ningún monitor en salas de musculación y cardio. El chico permaneció sólo en la sala de la planta -1 durante 40 minutos, aproximadamente, sin ningún tipo de asistencia ni apoyo.
Vergüenza de gimnasio municipal, es lo que siento al oír ese testimonio. Vergüenza de modelo de gestión deportiva.
Esto, José, no lo hubiera permitido.
VERGÜENZA.
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