Sr. Director...

LA CORRUPCIÓN, A VER!.
No hace falta explicar por qué nos preocupa la corrupción de los alimentos. Pues, todos hemos tenido un trastorno digestivo. Quizás sí que hay que explicar por qué es fundamental luchar contra la otra corrupción. La corrupción del empresario que tiene trabajadores sin asegurar. O la corrupción del ayuntamiento que encarga la obra a cambio de una comisión. (..). La corrupción en general de los que piden favores o los conceden. La corrupción que consiste siempre en no respetar las reglas. Es decir, la corrupción que consiste en "no hacer cola". (...).
Quizás sí que hay que explicar porque es necesario luchar contra la corrupción: "Porque distorsiona la competencia. Pues no ganan los mejores. Porque reduce la confianza en el sistema. Pues, pasan cosas no previstas o irregulares. Porque hace que los inversores de fuera no quieran visitarnos. Porque no se fían de nosotros. Porque la corrupción puede ser aprovechada por los partidos populistas para tomar el poder. (…).En definitiva, porque de la corrupción pueden derivarse muchos males: Pérdida de competitividad, aumento de la desigualdad y desorden. (...).
Dicho esto, celebro las últimas condenas. Lamento las últimas prescripciones. Y me gustan las últimas palabras de Rajoy: "Quizás no hemos hecho lo suficiente contra la corrupción. Seguro que podemos hacer más cosas! ".