Sr. Director...

Hay personas tan sinceras que ofenden cuando hablan. Y personas tan generosas que provocan el rechazo del receptor. Hay personas así. También hay personas que por estar más preocupadas por el bienestar de los otros, ni dicen siempre la verdad, ni su generosidad es invasiva.(..).

Digo esto por un artículo que he leído recientemente en un diario catalán, en el cual se habla de los hombres y de las mujeres. En este diario se dice que las mujeres mienten más que los hombres. Se dice que estas, a veces, mienten para que las otras personas se sientan mejor. (…).

Digo esto también porque últimamente he hablado con algunas personas orgullosas. Personas que se manifiestan con ostentación. Que exhiben ciertas virtudes: Personas que van con la verdad por delante. Alardeando de sinceridad. Y Personas dispuestas siempre a echarte una mano. Alardeado de generosidad. A veces he pensado que estas personas más que diciendo la verdad, estaban acusando a las otras de falsas. Y que más que ayudando, estaban acusando a los demás de egoístas. A veces he pensado que estas personas más que ayudar se exhiben!.

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