13/04/2009-. Agentes de la Guardia Civil destinados en el Puesto de Ciempozuelos detuvieron ayer (12 de abril) a un individuo acusado de la comisión de un delito contra la seguridad vial por llevar a dos de sus hijos, de 7 y 11 años de edad, en el maletero de su coche. Al parecer los menores recorrieron en esas circunstancias más de 35 kilómetros.
Según informa la Guardia Civil, los hechos tuvieron lugar en la carretera M-404 a su paso por el término municipal de Ciempozuelos, en la que se encontraba una Patrulla del Puesto de la localidad. Al observar la reacción de un individuo que circulaba por la citada vía, rápidamente sospecharon de él, por lo que procedieron a su identificación y al registro del vehículo. En su interior viajaban cinco personas, miembros de la misma familia.
Inicialmente los Agentes comprobaron que tanto el conductor como su esposa, que viajaba como acompañante, no hacían uso del obligatorio cinturón de seguridad, por lo que procedieron a su denuncia administrativa. Además, la mujer llevaba en brazos a un perro, motivo también de denuncia ante el peligro que acarrearía en caso de accidente.
Tras filiar a los ocupantes, la Patrulla del Puesto de Ciempozuelos, ante el nerviosismo que denotaba el conductor, le conminó a abrir el maletero. La sorpresa se apoderó de los Agentes de la Guardia Civil cuando en su interior hallaron a dos niños de 7 y 11 años, hijos del matrimonio, que estaban realizando el viaje en el interior del maletero en compañía de diversos enseres y de varias botellas de bebidas alcohólicas.
Por ello, detuvieron al conductor acusado de la comisión de un delito contra la seguridad del tráfico. Al conocer éste su nuevo estado legal se alteró en gran manera, y tuvo que ser reducido por los Agentes para evitar daños a su persona. Al parecer, la familia entera provenía de Madrid, y habían introducido a los niños en el maletero ante la falta de plazas en el vehículo, lo que supone que los menores habían circulado encerrados durante más de 35 kilómetros.
El detenido, J.O.G.J., ecuatoriano de 32 años con antecedentes por falsificación, ya ha sido puesto a disposición judicial.
La Guardia Civil recuerda que la reforma del Código Penal que entró en vigor el día 1 de Mayo del pasado año establece en el artículo 380 que:
«El que condujere un vehículo a motor o un ciclomotor con temeridad manifiesta y pusiere en concreto peligro la vida o la integridad de las personas será castigado con las penas de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta seis años.»
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