La Guardia Civil detiene a cinco personas por simular ser víctimas de robos

Agentes de la Comandancia de la Guardia Civil, en el marco de la “Operación Pinokios”, han logrado la detención de cinco personas por su presunta implicación en delitos de denuncia falsa, estafa, daños y un delito de hurto de vehículo a motor en Pinto.

La investigación se inició  tras las denuncias de dos talleres de un mismo propietario afincado en Pinto, en las que el dueño manifestaba haber sido víctima de dos robos, uno por el procedimiento del butrón y otro por el del alunizaje.

Los agentes realizaron las correspondientes inspecciones oculares en ambos talleres y tuvieron claras sospechas de que los hechos no se habían producido, “o al menos no se habían producido tal y como el denunciante manifestó”, explican desde la Guardia Civil.

Gracias a su investigación, la Guardia Civil supo que la compañía aseguradora de los talleres había indemnizado  al propietario con más de 48.000 euros por los robos,  que resultaron ser “totalmente simulados”.

Más denuncias falsas| Otro taller mecánico de la localidad también denunció un supuesto robo con fuerza por el procedimiento del butrón. En la inspección ocular correspondiente, se determinó que el butrón se había producido desde el interior de las instalaciones. Por tales hechos, el propietario había recibido más de 22.000 euros de la compañía aseguradora.

Una ciudadana china  acudió al Cuartel de la Guardia Civil a denunciar un robo en su tienda por valor de 10.000 euros. Los atracadores habrían accedido mediante el forzamiento de una cerradura, según denunciaba su dueña. De la inspección ocular practicada por especialistas de la Guardia Civil se dedujo que el forzamiento del cerrojo se había producido necesariamente con la puerta abierta.

A diferencia de los anteriores, el quinto y sexto caso se produjeron en un domicilio y en un trastero. Los autores denunciaron daños en las puertas de acceso de los mismos y cuando los agentes realizaron las correspondientes inspecciones detectaron que los signos de fuerza que se advertían no eran suficientes para haber logrado el acceso al interior del trastero. Además, la reclamación que habían hecho los propietarios era desproporcionada, 1800 euros por el domicilio y 1621 euros por el trastero.

Los agentes pudieron determinar “con pruebas de cargo sólidas y suficientes”, que los hechos no se habían realizado por delincuentes comunes, sino por simulación, en la mayoría de los casos, o sobrevaloración en la reclamación.

“Las detenciones se produjeron una vez que se iba teniendo pruebas suficientes para proceder a la imputación formal de cada uno de los denunciantes de los hechos descritos y se les imputaron seis delitos de denuncia falsa (simulación de delito), tres delitos de estafa a entidades aseguradoras, un delito de daños y un delito de hurto de vehículo a motor”.

Los detenidos son cuatro varones y una mujer, pinteños, con edades comprendidas entre los 36 y los 47 años de edad. Los seis hechos delictivos y las consiguientes detenciones se han producido de manera independiente,  a lo largo de un año y medio, y sin que se haya podido demostrar relación alguna entre los autores