Incompetente el uno, incapaz el otro
Cuando el PP estaba en la oposición, la indolencia de Rajoy provocaba preocupación en los suyos y desafección en el sector liberal del partido. Ahora, en el Gobierno, la cosa es más grave e irrita a buena parte de la sociedad.
Este hombre, impertérrito ante lo que acontece en la rúa y que difiere los problemas esperando que escampe, que dice tener claro lo que tiene que hacer, pero hace lo contrario de lo que dice, se proclama “independiente”.
Pero lo
que él llama “independencia” es alejamiento, cuando no ensañamiento, con la
sociedad, justo lo contrario que ha hecho con su propio partido, donde no ha
depurado responsabilidades por la trama Gürtel, ni ha reformado las
administraciones públicas, ni modificado
la ley electoral, ni suprimido los privilegios de la casta política. El
indolente Rajoy, como bien sabía Esperanza Aguirre, no es un refugio para la
tempestad que azota a España. Tras un Zapatero incompetente, tenemos a un ‘remendón’
incapaz de pilotar la regeneración de la política española. Eso sí, después de lustros nos enteramos, "gracias" a Bárcenas, que cobra 200.000 euros al año por ser presidente del Partido Popular (aparte de los famosos "sobres"), pero sólo cobra 75.000 euros por ser presidente del Gobierno de España. Un espejo de la fagocitación del Estado por los partidos políticos.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.47