Casa de Extremadura, Restaurante Hotel Las Artes, Savarín y Salones Roldán

Hoy en día hay que hilar fino para dar con uno de esos sitios “de toda la vida”, que saben maridar la gastronomía con las buenas maneras locales.

La Casa de Extremadura nos recibe con un bien atendido servicio de bar, donde podemos encontrarnos con nuestro acompañante -o acompañantes- antes de entrar al comedor. Sin prisas, por favor, hay que tomarse tiempo para la sugerente carta que nos ofrece Amador. En nuestra visita no pudimos resistirnos al solomillo con foie de pato y reducción de Pedro Jiménez, caímos ante su comida mediterránea y embutidos ibéricos. 

Y por supuesto, tómatelo con calma, porque en esta casa no se entiende una comida sin una pausada y agradable sobremesa.

Antes de sentarnos a comer en su restaurante nos damos una vuelta por las instalaciones del Hotel Las Artes y su SPA: sencillamente espectaculares. Calidad y lujo asequibles, que transmiten eso que dicen “estilo de vida”.

El restaurante del hotel Las Artes se caracteriza por una cocina de mercado y mediterránea, con productos frescos de primera calidad y una cuidada elaboración y presentación que dejan ver en sus platos. Además, pone a disposición de los clientes una amplia oferta gastronómica. A nosotros nos sorprendieron con bacalao al pil pil con gulas y piel crujiente y como consejo del chef la pantxineta casera de crema con chocolate caliente. 

En su cafetería ofrecen una variada carta de snaks para cenas. Aparte del restaurante, el hotel cuenta con salones privados con luz natural para la celebración de eventos familiares, comidas de empresa, bautizos, comuniones y bodas.

A pesar de su trayectoria de 15 años en Pinto, el restaurante es un gran desconocido para muchos pinteños. Quizás porque está integrado en el Hotel Plaza de Santiago y muchos piensan que es un restaurante exclusivo del hotel. 

Sin embargo, pocos lugares hay en Madrid tan acogedores y con una calidad-precio tan excepcional.

Recomendable cuando necesitamos realizar una comida por trabajo, reunión familiar o con amigos.

En este restaurante se cuida al máximo el detalle, tanto en la cocina como en su exquisito servicio y trato.

Nosotros nos dejamos recomendar por Juan, director del hotel: Habitas con chipirones, alcachofas en tempura y de segundo, costillar de cordero lechal. Conviene reservar mesa para que en la cocina puedan atender a cualquier sugerencia que se desee.

Los salones Roldán no es un simple bar restaurante familiar, tranquilo, de esos que ya no quedan, donde poder tomarte una copa o un café, que sin duda también lo es. Los salones Roldan son parte del movimiento social y asociativo de Pinto, un espacio para el diálogo y el debate. Ana Mari y José, regentes del Roldán, han cedido sin dudarlo su establecimiento a todo pinteño que haya querido informar, crear o protestar por algo con luz y taquígrafos.

Cualquiera que visite este restaurante debe saber que no es de los que funcionan con publicidad, sino con el boca a boca y por recomendación. Por su trato, dan motivos para correr la voz. Además, Ana es una excelente cocinera.