El pacto de la tajada

Pero es que unos meses después, en el Pleno del 31 de enero de 2008, Reyes Maestre volvió a la carga y les espetó a Martín Nieto y a Penit: “No van a tener el Gobierno de Pinto, yo garantizo la estabilidad del Equipo de Gobierno [PP-JpP], como mi compañera Valenciano”. Y no conforme con esto, remató: “Juntos por Pinto se fundó para acabar con la corrupción y el despotismo que usted [en referencia a Martín Nieto] y su socio de Gobierno [Carlos Penit] tenían contra los ciudadanos y los trabajadores de este municipio, y por eso perdieron las últimas elecciones”.

Por su parte, Martín Nieto y Penit llamaron a Reyes “indigno”, “no tiene las manos limpias”, “mentiroso”, “caradura”, etc. Por tanto, ¿qué ha pasado en Pinto para que ahora estos señores, en amor y compañía, se hayan juntado para gobernar juntos?
El PP y JpP dicen que los motivos provienen del “ladrillazo”, pero lo cierto es que los promotores de El Espacio del Motor, que se han sentido aludidos por estas diatribas, han arrojado la toalla y no quieren saber nada ni de los agentes de la moción de censura ni de los pacientes. Hoy por hoy El Espacio del Motor está muerto, por tanto difícilmente va a provenir de ahí ningún tipo de “especulación inmobiliaria”.

Los motivos son más directos y claros: es un pacto de la tajada en el que Maestre, un tránsfuga de los planteamientos fundacionales y electorales de JpP, tal como él los definió, y Penit, un delincuente indultado, no tienen nada que perder y sí mucho que ganar personalmente. Mientras que la vuelta al poder del PSOE da trabajo bien remunerado a varias decenas de personas que no pueden o no saben conseguirlo de otra manera.

Por lo demás, un partido importante y necesario para la gobernabilidad de Pinto, como es el PSOE, no debería prestarse a semejante espectáculo que abochorna a toda la ciudadanía pinteña, al margen de las ideologías o de los colores políticos. Y si al concejal Reyes Maestre le quedase un gramo de dignidad renunciaría a la moción de censura y entregaría su acta de concejal, pues ya es el único camino que le queda si quiere que alguien, algún día, crea que de verdad se ha equivocado en su lucha por buscar el bien de los pinteños.

Nosotros lo creímos -¡y cómo duele el error!- y defendimos a Reyes Maestre desde ZIGZAG. Sabemos que todos podemos equivocarnos, pero también hay que saber pedir disculpas, levantarse y seguir adelante aprendiendo de los errores.

Como decíamos en el editorial del número cero, allá por el ya lejano 1990, "ZIGZAG no pretende servir otro interés sino el de los pinteños, verdaderos titulares de la libertad de expresión en estas páginas" y más adelante en ese mismo editorial fundacional añadíamos: "Como ZIGZAG no tiene`'amo' jamás utilizará la información como elemento de trueque u objeto de compra-venta en el turbio mercado de los favores políticos y económicos". Desde estos principios fundacionales tenemos que manifestar que esta moción de censura -que en sí es un mecanismo tan democrático como una moción de confianza- es un disparate democrático por la suma de los protagonistas que la llevan a cabo. Y es también, en el caso del concejal Reyes Maestre, una traición a su electorado y una bofetada a la democracia representativa. Por todo ello, esta moción no es otra cosa que un espúreo acuerdo para repartirse la tarta del poder municipal, en definitiva no es otra cosa que un Pacto de la Tajada.