Boinas negras

Me levanto, 5,00. Para no contaminar, 45 minutos antes de lo habitual, cojo el coche, lo siento señor alcalde, la estación está al otro extremo del pueblo. Llego en 4 minutos, aparco en 14, ¿es posible que ya esté lleno el parking? No pueden hacerlo más grande… Voy a la taquilla. Vacía, uso una máquina, 10 minutos para obtener, con ayuda de una viajera, un billete de ida y vuelta por el módico precio de 6.50, joder con el PT TP (PuñeTero Transporte Público). Cojo el tren, 5,55, leo el periódico, llego a mi destino, 6,35. A que llego tarde.

Mil pasillos hasta la taquilla del metro. Nadie, otra máquina; saco un billete de 10 viajes por ahorrar, 9.30, joder con el PT TP. Llego al andén 6,45, son sólo dos estaciones pero presiento que no llego. Salgo de estampida, 6,54, corro por la calle, llego sudando como un atleta 7.05. Tarde. Con retraso, estresado, cansado, deprimido, sudoroso, sin poder tomar un café.

En coche, hubiera dormido 45 minutos más, hubiera llegado 20 minutos antes, hubiera desayunado esperando la hora, tendría 16 euros en el bolsillo, no olería a sudor y no hubiera leído noticias deprimentes de faisanes, ratas, autonomías endeudadas, pensiones y contaminación.

La de las fábricas, calefacciones y coches es contaminación atmosférica. Cuando suenan bocinas en sus atascos, se llama contaminación acústica. Cuando las ciudades arrojan basura a los ríos y los peces mueren, se llama contaminación acuática.

La contaminación es insalubre para todos los seres vivos. Cuando los ciudadanos necesitan limpieza, pureza, salubridad y en cambio no pueden respirar, les rebosan mentiras en los oídos, no llegan a fin de mes, no pueden vivir y la situación es irrespirable, se llama contaminación política.

A ver si arrojamos al contenedor correcto a los políticos que se hallan en el poder  y a los que amenazan con venir, porque la verdad es que… acongojan.
 Señor alcalde y demás boinas negras, o garbanzos, el transporte público de Madrid es el mejor… de Madrid, mañana, si quiere, lo utiliza usted.