
Es frecuente que con los distintos cambios vitales como subidas y bajadas de peso, embarazo y lactancia o el inevitable paso del tiempo, el pecho pierda firmeza, adoptando una forma más caída.
Aunque esto es perfectamente natural, es posible que ocasione una pérdida de autoestima y confianza que puede afectar a distintos aspectos de nuestra vida. Afortunadamente, contamos con soluciones tan eficaces como la mastopexia en Madrid, de la que te contaremos todos los detalles en los próximos párrafos.
¿Qué es mastopexia?
La mastopexia, conocida también como cirugía de elevación mamaria, es una solución para quienes buscan que el busto vuelva a su posición original a la vez que recupera su forma, sin que esto implique necesariamente aumentar su tamaño.
Se trata de una intervención quirúrgica con la que se remodela y levanta el tejido mamario y el pezón, eliminando el exceso de piel. Existen dos opciones:
- Combinada con implantes mamarios en el caso de que la paciente también quiera más volumen.
- Sin prótesis, solamente para levantar y tensar.
Una intervención poco dolorosa
Antes de ahondar en las ventajas de la mastopexia, podemos decir que una de ellas es que se trata de una intervención que resulta poco dolorosa.
Es ambulatoria (como mucho requiere de hospitalización de un día) y además las incisiones se pueden ir disimulando con el paso del tiempo.
Después, solamente habrá que pasar por unos días de reposo en los que no habrá actividad física que implique excesos. Por norma general, se puede volver al trabajo una vez transcurridos de 5 a 7 días. También serán necesarios vendajes y un sujetador especial durante el primer mes.
Principales beneficios de la mastopexia
La mastopexia va más allá de los ya muy importantes beneficios estéticos. Estas son algunas de las principales ventajas que puede aportarte esta intervención:
Psicológicos y funcionales
- Comprobar que su aspecto físico ha mejorado hace que las pacientes sientan una mayor confianza y seguridad en sí mismas.
- Es una magnífica forma de reponerse (también a nivel psicológico) de los cambios ocasionados por factores como lactancia, embarazo o una pérdida brusca de peso.
- Las molestias físicas que traen consigo unos senos caídos durante el ejercicio se reducirán.
- Se corregirá la mala postura provocada por unos senos caídos y de gran tamaño, y que muchas veces provoca dolor de espalda y cuello.
Estéticos
- La figura rejuvenecerá. Y es que el levantar el pecho implica que tanto la silueta como la postura también cambien. El cuerpo tendrá un aspecto más erguido, algo que indudablemente también ocasiona que la ropa siente mejor.
- Si bien es inevitable que el envejecimiento natural siga su curso, estamos ante unos resultados muy duraderos, que pueden prolongarse sin problemas durante años, sobre todo si se mantienen unos hábitos saludables.
- El tamaño y la simetría de los pechos se equilibrarán, haciendo que se vea una silueta más estilizada.
- Los senos tendrán una mayor firmeza, pues con esta intervención se reduce el exceso de piel y la flacidez.
- El contorno del seno resulta más atractivo y natural.
En definitiva, podemos decir que recurrir a la mastopexia nos aporta unos beneficios que van más allá de una cuestión estética, pues sentirnos bien y con confianza en nosotros mismos también influye de manera muy significativa en nuestra autoestima y actitud ante la vida.
Eso sí, como siempre que hablamos de una intervención, lo más importante es recurrir a un cirujano cualificado y seguir minuciosamente sus indicaciones para que no surja ningún problema.

















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