Tras una nueva jornada de retrasos e incidencias, visiblemente enfadados, los viajeros de Cercanías Madrid han llegado incluso a aporrear las puertas de las cabinas de los maquinistas.
Momentos muy tensos los vividos esta mañana en la estación de Atocha de Madrid. Una nueva avería ha provocado retenciones y demoras en ocho líneas, entre ellas la C-3. De hecho, la incidencia provocó que los vecinos de las estaciones de Pinto, Valdemoro, Ciempozuelos y Aranjuez tuvieran que bajarse en Villaverde Bajo y esperar durante más de media hora para, finalmente coger un tren de la C-4.
Esta ha sido la tercera jornada laboral para los usuarios de las líneas C-3 y C-4 de Madrid afectados por la remodelación del hall de Chamartin, que han supuesto el cierre del túnel de Sol, obligando a los viajeros a bajar en Atocha y realizar trasbordo en caso de que quieran continuar más allá en su viaje. El caos se ha apoderado del servicio. Todas las jornadas, desde el lunes, han contado con retrasos y aglomeraciones en las vías y convoyes.
“Sois unos putos sinvergüenzas”, gritaban visiblemente enfadados los viajeros, que han llegado incluso a aporrear las puertas de las cabinas de los maquinistas. Cientos de imágenes, textos y vídeos recorren las redes sociales exigiendo soluciones. Las obras durarán hasta el 23 de diciembre de este año y la terrible situación vivida durante estos días en el servicio ha hecho saltar todas las alarmas y la desesperación de los viajeros.
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