Denuncian el deterioro del campo de fútbol del Restón de Valdemoro: “Causa infinidad de lesiones”

En los casi veinte años que han pasado desde que el Club Inter de Valdemoro empezase a jugar en el campo de fútbol del Polideportivo El Restón, Casildo Portugués ha visto cómo las instalaciones se deterioraban sin que el Ayuntamiento hiciera nada para evitarlo. “No ha habido ningún tipo de mejora desde la inauguración del campo en 2004. Llevamos pagando un montón de años las horas de entrenamiento y ni siquiera tenemos un conserje que nos abra y cierre las instalaciones”, explica el presidente y fundador del club de fútbol, quien cuenta con la ayuda de un vecino jubilado para llevar a cabo esta labor de forma desinteresada.

La falta de mantenimiento que denuncia Portugués ha provocado que el marcaje de las líneas en la hierba artificial se haya deteriorado y haya dejado agujeros en el campo, cuyo estado preocupa al presidente especialmente por ser la causa de “infinidad de lesiones”.

“En los años que llevo al frente del club he visto cómo pasábamos de tener subvenciones e instalaciones nuevas a no tener nada”, afirma indignado, por ver que al final los que pierden son sus jugadores. “He visto pasar a todos los partidos políticos y he comprobado cómo, al final, el problema es que no consiguen aprobar inversiones porque no tienen mayoría. Y el pato, lo acabamos pagando los vecinos”. 

Portugués es vecino de Aranjuez, donde dice encontrar una situación totalmente distinta a la que vive diariamente como presidente del Club Inter de Valdemoro. En el municipio en el que reside, sí subvencionan a los clubes deportivos —algo que recientemente también ha hecho Pinto— y apuestan por la creación de nuevas instalaciones para los entrenamientos y partidos: en agosto se adjudicaron las obras de construcción de un nuevo campo de fútbol en el barrio de La Montaña. “De no arreglar nuestro campo, lo ideal sería que hiciesen unas nuevas instalaciones en el barrio del Hospital y que se asegure su mantenimiento, para que no acabe en la situación en la que están las nuestras después de dos décadas", sostiene. 

Hace tres años, los equipos de las categorías superiores del club —juvenil y aficionados A y B— se vieron obligados a entrenar y jugar en Titulcia. “Subimos a Preferente con el primer equipo y las instalaciones de Valdemoro no eran suficientes. Titulcia nos cobraba por entrenamiento y partido y es un coste que ahora mismo no podemos asumir”, explica Portugués, a quien en mayo un delegado de la Real Federación de Fútbol de Madrid (RFFM) avisó de que “no se iba a poder jugar en el campo del Restón, si no se hacía algún arreglo antes de la temporada 2022/2023”. 

El verano pasó sin intervención alguna y el presidente del Club Inter de Valdemoro decidió informar de la situación a la RFFM. Si se ha seguido jugando en el campo, en palabras del vecino de Aranjuez, es “por no dejar a los niños sin jugar”. 

El Ayuntamiento se ha defendido afirmando que la última intervención en el campo se llevó a cabo en el mes de abril. “Se realizó la reparación parcial del césped en aquellas zonas que se encontraban más deterioradas”, han asegurado a ZIGZAG fuentes municipales. Sobre la ausencia de subvenciones, el Consistorio ha querido dejar claro que, “aunque no cuenten con una ayuda directa —en Valdemoro se reservan a asociaciones en el ámbito de la salud—, sí que tiene un 70% de descuento sobre el precio que cuesta el alquiler del campo, al que se suma un coeficiente corrector del 30% adicional sobre el precio reducido, por el estado actual en el que se encuentran las instalaciones”.

Unas obras en la pista de atletismo que no llegan 

El campo del polideportivo de El Restón no es la única instalación deportiva que ha despertado el descontento vecinal por la falta de mantenimiento. Desde que el proyecto saliese a licitación a mediados de 2021, los continuos retrasos en el inicio de las obras de rehabilitación de la pista de atletismo municipal han traido más de un quebradero de cabeza a sus usuarios. 

Lo último que se supo sobre estos trabajos fue que el Ayuntamiento había tomado la decisión de romper el contrato firmado con la empresa adjudicataria, ante el incumplimiento de los plazos de ejecución acordados. Los trabajos contaban con un presupuesto máximo de 1.339.875,29 euros, para que los valdemoreños pudiesen disfrutar de unas instalaciones deportivas “plenamente operativas en los primeros meses de 2022”.  

Ha llegado enero de 2023 y los atletas de Valdemoro, algunos con una repisa llena de premios y reconocimientos como el exolímpico Jesús España, siguen entrenando sobre una pista de cemento, llena de césped y grietas.