
Las espigas son especialmente molestas para los perros, ya que son afiladas y terminan en punta.
Vecinos y dueños de perros han pedido al Ayuntamiento que siegue las espigas que inundan las áreas de esparcimiento canino -los denominados pipicanes- de Pinto. “Hemos tenido que llevar al veterinario a alguno de nuestros amigos caninos por las espigas que hay dentro del pipican. Jugando, se les ha metido en sus hocicos o en las orejas, el cuerpo también lleno. Los gastos del veterinario no son baratos”, narra una vecina.
Las espigas son especialmente molestas para los perros, ya que son afiladas y terminan en punta. Su forma de arpón les sirve para adherirse a los animales. Al clavarse en ciertas partes como almohadillas, boca, nariz, ojos y orejas, pueden causar dolor, heridas e infección.
Los usuarios de estas áreas también han pedido al Consistorio que arregle los pipicanes y cree nuevas zonas. Unas 200 personas han firmado un escrito en Change.org solicitando las reparaciones de las áreas caninas en las hay cuencos oxidados, fuentes rotas, luz escasa o revelan una limpieza insuficiente: “Hay un exceso de obstáculos en recintos pequeños, con una ubicación muy peligrosa que ocasionan lesiones y accidentes importantes y dificultan que nuestros perros puedan correr y jugar libremente”.
Ricardo | Miércoles, 25 de Mayo de 2022 a las 17:07:49 horas
Yo no es por desanimar, pero viendo cómo están los parques para humanos, no esperéis movimientos rápidos para acondicionar los parques para perros. Casi os recomendaría organizaros entre varios y darle uso a aquellas palas que se compraron por decenas cuando Filomena.
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