
El letrado ha logrado que el Tribunal Supremo le reduzca un año la condena que le impuso la Audiencia Provincial de Cáceres, por quedarse con el dinero de la menor a la que representaba.
Un abogado madrileño ha conseguido que se le rebaje un año la condena que le había impuesto la Audiencia Provincial de Cáceres, por haberse quedado con cerca de 8.000 euros de una niña a la que representaba en la venta de una vivienda que había heredado en Valdemoro.
El letrado había sido condenado a un año, nueve meses y un día de prisión, a no poder ejercer su profesión durante un año y a tener que entregar a la representante legal de la menor los 7.958 euros que la compradora de la casa le pagó —por indicación suya— directamente a él. Le fueron abonadas seis facturas por un importe total de 7.510 euros, añadiendo a esta cantidad otra factura de 449 euros para pagar a una procuradora.
La Audiencia Provincial de Cáceres le había condenado por cometer los delitos de apropiación indebida, de deslealtad profesional y de estafa. El letrado recurrió primero la sentencia ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, no obteniendo más que una confirmación.
Finalmente, ha conseguido que el Tribunal Supremo considere que no existió delito de deslealtad profesional, al haber cumplido con el trabajo para el que fue contratado pese a quedarse con dinero de su cliente, y que se le rebaje así un año de prisión.
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