Refugiados ucranianos cruzando la frontera con ucrania | EFEHan rellenado los formularios de una red de voluntarios que cuenta con los contactos para coordinar estos viajes y ofrecer domicilio a las personas que abandonan su país por la invasión de Rusia.
En un momento en el las organizaciones sin ánimo de lucro (ONG) están saturadas y el Gobierno de España se encuentra aún sentando las bases para el acceso a los permisos de residencia y al trabajo de los refugiados ucranianos —fue ayer cuando se habilitaron los primeros centros de acogida—, los ciudadanos han decidido moverse y hacer lo que esté en su mano para ayudar a las familias que se ven obligadas a dejar su país para huir de los bombardeos.
Los vecinos de Pinto no se han querido quedar atrás. A las recogidas de material humanitario realizadas en negocios, parroquias y pabellones deportivos, se suma ahora el impulso de iniciativas para poner en contacto a ucranianos que necesiten asilo y personas que estén dispuestas a dárselo.
La pinteña Alexandra Fernández decidió dirigirse a una red de voluntarios dedicada a esta labor cuando recibió la llamada de auxilio de un ucraniano residente en Pinto desde hace cinco años. “Me comentó que la prima de su mujer venía de camino con su familia y que no tenían dónde alojarse”, comenta a ZIGZAG.
La vecina conocía de antes a estos voluntarios, porque ya habían organizado una iniciativa parecida para acoger a refugiados provenientes de Siria. “Se trata de un grupo de personas dispuestas a hacer todo lo posible por ayudar, que se organizan por regiones a través de grupos de Whatsapp y Facebook”, explica la trabajadora, quien puso en contacto a la coordinadora de la Comunidad de Madrid con el ucraniano que le solicitó ayuda.
El grupo organiza a personas dedicadas a tres actividades diferentes: las que se proponen para acercarse con sus vehículos hasta la frontera de Ucrania con Polonia y Rumania —donde tienen contactos—, las que deciden alojar a refugiados en su domicilios y las que quieren colaborar como traductores.
Para los que deciden emprender el viaje de más de 3.000 kilómetros hasta territorio ucraniano, a lo que Alexandra dice que ya se han ofrecido varios vecinos de Pinto, el grupo tiene contactos con alojamiento en Berlín que les aseguran descanso sin necesidad de pagar hoteles.
Los refugiados “no son caramelos”
Estos voluntarios han creado un grupo en Facebook en el cuentan con varios formularios para guardar un registro de todos los ucranianos que soliciten ayuda, de transporte o de asilo, y de todos aquellos que quieran ofrecerse a colaborar con ellos. “Hay que tener en cuenta que son personas, no caramelos. Necesitan ayuda psicológica y mucho apoyo para su reinserción social y laboral”, afirma Alexandra.
Las personas que rellenen el formulario para ofrecerse a dar auxilio tienen que pasar primero por una entrevista en la que se les explica cómo va a funcionar todo el proceso. “Hay personas que se apuntan y no tienen en cuenta que no es una cosa de acogerlos quince días, que pueden ser meses”, indica la vecina.
En Pinto, por el momento, no se han impulsado este tipo de acogidas porque lo que se prima es que se den en poblaciones donde se oferten varias casas, para que los ucranianos puedan tener comunicación entre sí y se apoyen. Un ejemplo de ello es una asociación de vecinos en Moralzarzal, en la que se ha ido reconduciendo a los refugiados que han llegado a la Comunidad de Madrid a través de esta red de voluntarios, y a donde ha ido a parar finalmente la familia a la que conocía el ucraniano residente en Pinto.
¿Deberían hacer algo más las instituciones? Alexandra considera que ahora mismo todo depende de las directrices que tiene que sacar adelante el Gobierno central, que ya ha establecido que la solicitud de asilo de los refugiados ucranianos será tramitada en un plazo máximo de 24 horas. La resolución incluirá la autorización de residencia y, en el caso de los mayores de edad, de trabajo.
Pero esta vecina sí que pide que se aporten medios a estos voluntarios, que están coordinando todo desde sus propias casas y con sus ordenadores y recursos. Y en el caso de que finalmente se consigan suficientes domicilios para dirigir a varios ucranianos a Pinto, considera que el Ayuntamiento debería “tomar la decisión de implicarse más”.

















Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.219