Profanan más de 30 tumbas en el cementerio de Ciempozuelos

Los brazos y pies de un Jesucristo sin cuerpo colgando sobre la piedra, así se encontró ayer Juan Andrés la lápida de su familiar en el camposanto de Ciempozuelos. La Guardia Civil y la Policía Local buscan al autor o autores de la profanación de 35 tumbas en el cementerio de la localidad. Se llevaron cristos, crucifijos y otras figuras de funerarias de metal y cobre que adornaban las lápidas, produciendo, además, desperfectos sobre las piedras al emplear la fuerza para sustraer estos elementos. Los ladrones actuaron de noche, bajo la protección de la oscuridad. 

“Lo habíamos colocado hace menos de un año, para un familiar que murió con tan solo 36 años”, cuenta Juan Andrés, dolido y afectado por el valor sentimental que ha supuesto este robo, pero también preocupado por el coste económico que supondrá reponer la figura. “La sepultura nos costó alrededor de 6.000 euros”, desvela este vecino, que critica que todavía no se haya puesto en contacto con su familia ningún miembro del Gobierno municipal.  

Arsenio se acercó al cementerio el martes por la mañana. Se cumplían seis años del fallecimiento de su padre y esperaba, como cada aniversario de su muerte, poder rezar frente a su sepultura. “Fue al llegar cuando vi que habían arrancado el Cristo que había en el cabecero. Ha sido bastante duro, vas a ver a tu padre y te encuentras de frente con el vandalismo atroz que nos rodea. Es tremendo que ya no se tenga ni respeto por un lugar sagrado”, cuenta.  

Ninguno de estos dos vecinos ha puesto de momento una denuncia particular y confían en el trabajo del cuerpo de Policía y las acciones del Ayuntamiento. Esta es la primera vez que ocurre un robo de estas características en el cementerio municipal, aunque los vecinos recuerdan que hace años el camposanto fue también profanado por un grupo de jóvenes que hacían botellón, aunque en aquel momento el grupo de vándalos se dedicó a destrozar las pequeñas capillas que acompañaban a las sepulturas, no a robarlas. 

Desde el Ayuntamiento han informado a ZIGZAG que la investigación policial continúa. En cuanto a la responsabilidad del Ayuntamiento sobre los deterioros provocados en las lápidas, será el equipo jurídico municipal el que vea si el Consistorio debe o no sufragar parte de los desperfectos.