Organizan una marcha ciclista entre Ciempozuelos y Aranjuez para defender el futuro del río Tajo

La asociación Ecologistas en Acción impulsó, el pasado domingo 3 de octubre, la marcha ciclista “reivindicar un Tajo vivo". A las 10:30 horas, los participantes salieron de la estación de cercanías de Ciempozuelos, con la intención de llegar a Aranjuez a las 13:00 horas, para la lectura de un manifiesto en defensa de un río “con futuro, conservado y con vida”.

Los ciclistas iban equipados con chubasqueros con capucha y botas de montaña, preparados para la lluvia que la previsión metereológica había pronosticado sin equivocarse. La ruta de la mañana, de 22 kilómetros entre ambas localidades, fue totalmente llana. A la tarde, los 20 kilómetros de recorrido contaron con un cierto desnivel en la subida al castillo de Oreja.

En el manifiesto que se leyó, en el momento en el que los ciclistas llegaron a Aranjuez, se enumeraron como problemas que afectan al Tajo: las captaciones insostenibles de agua para el trasvase Tajo-Segura —que dejan al río sin causales suficientes—, los vertidos contaminados procedentes del agua metropolitana de Madrid, y el deterioro y degradación de sus ecosistemas fluviales. 

Estas dificultades no afectan al Tajo solo a su paso por la región madrileña. Según Ecologistas en Acción, se extienden también por localidades como Toledo o Talavera de la Reina. 

Por ello, en su marcha ciclista han exigido que las administraciones públicas atiendan a su deber de detener la degradación y mantener un buen estado ambiental en las masas de agua, para lo que proponen que se establezcan “caudales ecológicos con todos sus componentes en todos los ríos, en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Supremo en marzo de 2019”. Esto supondría acabar con el trasvase Tajo-Segura. 

Asimismo, también han solicitado una mejora en la depuración de las aguas residuales madrileñas, “especialmente de los vertidos que van a parar al Jarama, Manzanares y Guadarrama”.