El piloto sanmartinero, que compitió en el Gran Premio de Aragón con una mano recién operada, sumó una nueva victoria que le acerca a la lucha por el título.
El piloto Raúl Fernández sigue marcando la diferencia en el Mundial de Moto 2. El de San Martín de la Vega ya sabe lo que es ganar hasta recién operado: compitió en el Gran Premio de Aragón sin infiltrarse y con apenas un ibuprofeno para calmar el dolor. Raúl se rompió el quinto metacarpiano de la mano derecha tras una caída en bicicleta, y tuvo que ser operado el pasado jueves.
La gran carrera del sanmartinero desquició especialmente a Sam Lowes, al que adelantó en la cuarta vuelta y que acabó yéndose al suelo por forzar la remontada. Por detrás de Raúl acabó su gran rival por el título, Remy Gardner, que todavía conserva una ventaja de 39 puntos pero ve cómo la lucha ha vuelto a abrirse. “Ha sido una de las carreras más duras de mi vida”, ha reconocido posteriormente en redes sociales. Fernández ha querido agradecer todo el apoyo recibido y ha dedicado la victoria a Hugo Millán, el joven piloto onubense de 14 años que falleció en competición el pasado mes de julio.
Para el de San Martín de la Vega la de Aragón ha sido el quinto triunfo de la temporada, un hito que solo había conseguido un debutante en la categoría de Moto2, Marc Márquez, en el año 2011. Además, permite que Red Bull KTM Ajo se asegure el premio al mejor equipo.
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