Una nueva denuncia, que se ha incorporado al caso Púnica, apunta que el exregidor realizó varias irregularidades para ganar 10 millones de euros.
El sumario del caso Púnica ha incorporado una denuncia anónima sobre presuntas irregularidades cometidas por Francisco Granados durante su etapa como alcalde de Valdemoro. Granados “como partícipe del 33%” de la empresa Tuvalu Gestión S.L. habría conseguido más de 10 millones de euros de beneficios en una operación inmobiliaria entre 2001 y 2004.
La Fiscalía considera que los hechos guardan una “directa conexión” con dos piezas del caso Púnica. Según la denuncia, todo comenzó cuando el pleno municipal aprobó un estudio de detalle para construir la calle de Trigo, que en ese momento tenía uso dotacional. Una operación que, aseguran, tenía como fin que ese suelo pasase a ser residencial, como así acabó ocurriendo con la aprobación del PGOU de Valdemoro en 2004.
En octubre de 2002 se constituyó la empresa Tuvalu Gestión, de la que también forman parte otros investigados del caso Púnica como el conseguidor David Marjaliza y el constructor Ramiro Cid. Los denunciantes afirman que todos ellos conocían que la calle se iba a construir por lo que decidieron adquirir una finca por 2,5 millones de euros en febrero de 2004 con la que cerrar una operación inmobiliaria. Dos meses después se aprobaría el PGOU.
El terreno se revalorizó rápidamente. De esta forma, la sociedad vendió la finca en abril de 2006 por 12.816.445,67 euros, lo que les supuso un beneficio en menos de año y medio de 10 millones de euros.
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