Los mejores fertilizantes y nutrientes para tu cultivo

Los grower, o practicantes veteranos del autocultivo, llevan muchos años de ventaja a los que se inician ahora en este mundo: son aficionados con unos conocimientos excepcionalmente profundos en lo que se refiere al cultivo especializado de esta planta. La suma de unos aficionados casi profesionalizados y una gran cantidad de nuevo público ha dado lugar, cómo no, a una industria con una oferta especialmente amplia de productos tremendamente especializados en el cultivo de cannabis. Solo hay que echar un vistazo a la sección de fertilizantes de una tienda como Eurogrow para hacerse a la idea de la profundidad del asunto.

Estimuladores de floración, de crecimiento de raíces, sustratos y cócteles de nutrientes especializados según la etapa de crecimiento de la planta e incluso fertilizantes diseñados concretamente para cultivos THC o CBD, pasando por el control y prevención de plagas y enfermedades y las grandes marcas del sector.

La clave está en la justa medida

La planta cannabis necesita de cuidados muy específicos para obtener resultados óptimos. Por ello, se debe tener muchísimo cuidado con la cantidad y el tipo de fertilizante a utilizar. En este caso, tanto una carencia como un exceso pueden llegar a suponer la pérdida total de lo que se espera obtener de ella.

Así, se entiende como carencia la falta de elementos nutritivos aportados a la planta. En este caso se necesitará de un abonado completo y correcto para que la planta pueda desarrollarse sin problemas. De manera orientativa se debe saber que el tamaño de la planta es un medidor fiable a la hora de aportarle más o menos cantidad de nutrientes a su sistema radicular.

En cambio, los excesos de abono o fertilizantes son sinónimo de acumulación de sales en el propio metabolismo de la planta. La única solución es conseguir equilibrar su alimentación mediante el propio sustrato y medir su abonado. Este proceso es mucho más complejo de paliar que la carencia, ya que conlleva, entre otros tratamientos, el lavado de raíces muertas.

Por suerte, detectar tanto el exceso o carencia de nutrientes en la planta cannabis es relativamente sencillo. Tan solo se debe estar atento al color y estado que toman las hojas.

En el caso de carencia, la planta se mostrará más débil, incluyendo la posible aparición de hongos y algas. En caso más severos también menguarán el sabor de los cogollos. Estos se verán mucho más pequeños y pesarán bastante menos.

Sin embargo, en el caso de los excesos, se podrán observar quemaduras en las hojas y un cambio drástico en el sabor de los cogollos.

Por último, se debe recordar que es posible que estos síntomas son causados no solo por la falta o exceso de fertilizantes, sino que también puede deberse a una mala absorción de los nutrientes por parte de las raíces.