La gran nevada ha mostrado que en Pinto no tenemos Gobierno

Es verdad que casi todos los gobiernos de los pueblos de la Comunidad de Madrid han respondido deficiente o pésimamente ante esta emergencia, esperando una evolución favorable de la climatología. Es cierto también que no hemos conocido una nevada y su posterior ola de frío como esta. Pero no es menos cierto que los ciudadanos pinteños estaban acostumbrados a otro tipo de respuestas por parte de la administración local. A pesar de estar anunciada por los meteorólogos, el gobierno de Pinto fue negligente en su preparación y previsión para dar una mejor respuesta a la emergencia.

Desde mi punto de vista hacia falta un mando único con una serie de colaboradores aportando soluciones. Pero eso tenía que haberse decidido con una semana de antelación a la nevada, desde que se conocía el problema que iba a existir. Sin embargo, no fue así. El día 5, cabalgata. El 6, poner pilas a los juguetes. El 7, comentarios sobre la fiesta del día anterior. El 8, ver nevar. Y el 9 y 10, hacer muñequitos de nieve.

Durante el desastre, en Pinto solo ha existido un mando único: la Interventora, que una vez más se apropia del mando y las cosas se hacen como ella diga, sin que haya un gobierno con personalidad y capacidad para ponerla en su sitio.

Si la semana anterior a la nevada se hubiera encargado Aserpinto de contratar cuadrillas, maquinaria, camiones, palas y picos y el día 11 se hubiera recogido nieve blanda, no hubiéramos sufrido las consecuencias de la ola de frio como la hemos sufrido y aún, nueve días después, seguimos sufriendo. Pero nada de esto se hizo y, todavía hoy, el panorama es desolador. Ni siquiera los vecinos y las comunidades han dispuesto de sal para poder ayudar, no se han puesto puntos de reparto y todo porque alguien del equipo de gobierno piensa que la única que sabe echar sal es ella.

Los colegios han estado abandonados durante la semana entera. Ni una llamada a los directores ni una visita para ver el estado de los centros y como se podían arreglar los problemas.

En definitiva, hemos vivido el caos mas absoluto, dentro una situación nada sencilla.

La incapacidad ante esta emergencia refleja lo que hemos vivido durante todo 2020. El PSOE carece de liderazgo y no hay ni gobierno, ni partido. Los militantes somos meros espectadores del desastre y ni siquiera tenemos un medio para poder opinar internamente. Se hacían reuniones preparatorias de plenos por videoconferencia y han desparecido, debíamos ser molestos algunos.

Excusándonos en la pandemia, hemos hecho desaparecer la crítica, la autocrítica y los órganos de dirección. Posiblemente este equivocado y no sea así, pero a fecha de hoy considero que hemos perdido muchos votos. Gente que nos votó hoy dice que no nos volverá a votar y coger grano de otros graneros está francamente complicado.

Ahora con el pacto de progreso que viene perderemos otros cuantos apoyos, porque la gente moderada cuando escucha hablar de Podemos y aledaños, sale corriendo. Pero bueno, esa es otra historia en la que tendré derecho a opinar y espero que se me respete.

Para terminar, hace aproximadamente un mes pregunté a un dirigente de Pinto si era consciente de que si hubiera elecciones en ese momento, las perderíamos. Me contesto que “por supuesto”. Espero que hoy sea más consciente.