Las especies se encuentran en este momento en periodo reproductor y están sufriendo un grave declive poblacional.
Valdemoro es uno de los núcleos en los que la avutarda y el sisón, ambas especies amenazadas, desarrollan su vida. La decisión de la Consejería de Medio Ambiente de permitir la caza durante el confinamiento, aseguran desde Ecologistas en acción, puede acabar con esa vida.
“Se trata de uno de los últimos refugios del centro peninsular para especies como la avutarda, los aguiluchos cenizo y pálido, el cernícalo primilla y el sisón común”. Este último, añaden, ha perdido en los últimos 10 años el 50% de su población, “de ahí la necesidad de evitar escrupulosamente perturbaciones directas y de su hábitat en pleno ciclo reproductivo”, sostienen.
Desde la asociación aseguran que están tomando medidas legales y que reclamarán "a los responsables de este absoluto despropósito el estado del informe comprometido sobre la situación de las poblaciones esteparias en la IBA 393, en el marco de la Proposición No de Ley (PNL 214/18) aprobada por la Asamblea de Madrid en febrero del pasado año".
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