La zona ha permanecido cerrada al paso desde que una mujer resultase herida al caerle una rama en la cabeza.
El pasado 1 de diciembre una mujer tuvo que ser intervenida tras caerle una rama de grandes dimensiones en la cabeza en el parque de las víctimas del terrorismo de Pinto. La zona había permanecido cercada desde entonces por bandas de Policía Local y Guardia Civil para evitar el paso de los vecinos mientras se llevaba a cabo una dura poda. El Ayuntamiento ha decidido talar once ejemplares “que se encontraban enfermos debido seguramente a la sequía que estamos padeciendo y a su edad”, y los sustituirá por 22 árboles nuevos que se plantarán en los próximos meses.
En cuanto al incidente, aunque el Gobierno no ha recibido ninguna denuncia al respecto ha solicitado un informe a la agencia de control de calidad (AEMA) para esclarecer lo sucedido. “El informe realizado por la UTE no apunta en esa dirección, pero queremos contrastarlo”, ha explicado el concejal de Ecología Raúl Sánchez.
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