Pinto pierde definitivamente su parte del polígono Cobo Calleja

Miércoles, 09 de Febrero de 2011 Tiempo de lectura:

On la firma del deslinde de términos municipales entre los ayuntamientos de Pinto y Fuenlabrada el pasado 4 de febrero, nuestro municipio ha perdido definitivamente los 228.000 metros cuadrados de suelo industrial que siempre tuvo en el polígono industrial Cobo Calleja, y con ellos la posibilidad de ingresar anualmente más de un millón de euros en concepto de impuestos que pagan las decenas de empresas ubicadas en lo que antes era terreno pinteño. Tras años de litigio, el Tribunal Supremo dictó el pasado año sentencia firme a favor de Fuenlabrada, con lo que se consumó el despojo sin más posibilidades de recursos.

Como es conocido, estos terrenos pinteños fueron cedidos gratuitamente a Fuenlabrada, sin ningún tipo de contraprestación, por Carlos Penit (IU) cuando ostentaba el cargo de alcalde de Pinto. Precisamente, en 1993 el Tribunal Supremo inhabilitó a este señor para todo cargo público por un delito de prevaricación (“dictar resoluciones injustas a sabiendas”). Penit había beneficiado ilegalmente al promotor inmobiliario Cobo Calleja dejándole construir naves industriales en terreno rústico, lo que supuso para el empresario unas importantes plusvalías y un detrimento para las arcas municipales.

El prevaricador Penit jamás dio explicaciones de su despojo a favor de Fuenlabrada más allá de la peregrina declaración de que lo hacía para evitar supuestos “problemas burocráticos para el cobro de impuestos por dos administraciones locales diferentes”. Sin embargo, cuando perdió la alcaldía en las urnas en 1995, y por tanto el sustento al que estaba acostumbrado, buscó ‘refugio económico’ en el Ayuntamiento de Fuenlabrada, que le recompensó tanta generosidad dándole el cargo de director financiero (¡?) de ese Ayuntamiento con un sustancioso sueldo que entonces ascendía a más de medio millón de pesetas mensuales. Y el año pasado tras conocer el señor Penit la sentencia definitiva manifestó en tono chulesco que se sentía “muy orgulloso” de lo que había hecho.

Lo cierto es que actualmente Penit es el único de los 21 concejales de Pinto que se ha negado a bajarse el sueldo un 10%. Incluso ha tenido el descaro y la desvergüenza de ‘reprobar’ a un concejal en el último Pleno de Pinto. Si hay un concejal de Pinto que merece la reprobación más absoluta ese es el prevaricador Carlos Penit.

Como ya hemos denunciado en ZIGZAG en otras ocasiones, no es de recibo que después del despojo al que el señor Carlos Penit ha sometido a Pinto, el PP le permita que siga riéndose de los ciudadanos y del sistema democrático permitiéndole ser el concejal que más cobra, sueldo que le pagamos todos los pinteños, como si de un tributo feudal se tratase. Nos consta que son muchos los ciudadanos de Pinto que así opinan, más allá de las simpatías políticas por uno u otro partido.