El mundo de la empresa ha vivido en una revolución en los últimos años. Las grandes compañías han demostrado que la figura de un jefe inaccesible y despiadado al que hay que temer no es la mejor opción para el buen funcionamiento de la empresa. Y eso es algo que los negocios pequeños y medianos también están empezando a comprender.
Lo cierto es que un equipo cohesionado y en el que todos los trabajadores y directivos son capaces de relacionarse con confianza y sinceridad ofrece mejores resultados. Por eso las actividades Team Building se han convertido en una excelente herramienta para mejorar el ambiente de trabajo y que cada uno de los miembros del equipo sea capaz de dar lo mejor de sí.
¿Qué es el Team Building?
El concepto de Team Building surge hace casi cien años en Estados Unidos. Básicamente consiste en, como su propio nombre indica, construir equipos.
Psicólogos especialistas en comportamiento humano se dieron cuenta de que un ambiente laboral negativo e individualista no obtenía tan buenos resultados como los lugares de trabajo a los que los empleados acudían contentos y donde existía compenetración con los compañeros.
En esencia, el Team Building es una suma de actividades de ocio en las que no solo se busca la diversión, sino que los diferentes trabajadores saquen lo mejor de sí y comprendan que sus debilidades son menos si se apoyan en el resto del equipo.
Tipos de actividades de Team Building
En la actualidad existen numerosas actividades enfocadas a la construcción de equipos profesionales. Estas son algunas de las más demandadas por el éxito conseguido y demostrado a través de los años:
Haka
El Team Building Haka es una de las actividades estrella de esta corriente. Consiste en apropiarse de la famosa danza tribal de equipos de rugby como la selección neozelandesa.
En la actividad, el equipo se mete de lleno en la creación e interpretación de uno de estos bailes basados en las danzas maoríes, poniendo ante el resto de sus compañeros toda su creatividad, libertad y deseos de pasarlo bien.
Percusión
La música amansa a las fieras, y el Team Building de percusión es el más claro ejemplo de ello.
En la actividad, compañeros de trabajo y directivos deben colaborar para poder interpretar una batukada que suene bien y haga mover el esqueleto a todo el equipo. Sin duda, es una de las actividades de Team Building más movidas y llamativas.
El gasto energético y el trabajo individual por un bien común demuestra que todas las tareas, por muy pequeñas o repetitivas que sean, están enfocadas a un bien común: elaborar la más perfecta de las melodías.
Gastronomía
El Team Building gastronómico es un concepto algo distinto. En este caso se trata de disfrutar de uno de los placeres más importantes que tiene el ser humano: la comida.
Pero para hacerlo más interesante la actividad se convierte en una competición por ver quien logra clavar uno de los platos típicos de la gastronomía española: la paella.
La competencia sana entre los compañeros hace que cada uno de los participantes quiera superarse para lograr el mejor plato. Lejos de ser motivo de disputas, el beneficio es común cuando todo el equipo puede beneficiarse del esfuerzo común realizado probando los arroces más apetitosos que han podido crear.
Trasladarlo al mundo de la empresa es fácil: dar la mejor versión de uno mismo es positivo tanto para uno mismo como para el resto del equipo.


















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