El descuartizador de Valdemoro: "La maté por reírse de mi acento"

El juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Valdemoro ha decretado prisión provisional comunicada y sin fianza para el acusado de descuartizar a una joven de 18 años el pasado miércoles en Valdemoro.

Los hechos salieron a la luz cuando Leonardo V.J., el presunto asesino, fue sorprendido por la Guardia Civil cuando se disponía a deshacerse del cráneo de la joven en unos matorrales cercanos a la vivienda donde se cometió el crimen.

La Guardia Civil acudió a la vivienda sita en el 124 de la calle Francia después de que la ex pareja sentimental del autor confeso del crimen acudiese a las dependencias del cuartel para informar de los hechos sucedidos unas horas antes. Al parecer, Leonardo le habría pedido ayuda para deshacerse de las distintas partes del cuerpo y ella habría accedido por miedo a que le hiciese lo mismo que a la joven. Horas después, denunció los hechos aportando incluso fotos para probar el asesinato.

Cuando los agentes llegaron a la vivienda, que Leonardo ocupaba de forma ilegal desde 2014, encontraron restos de sangre en todas las estancias y partes del cuerpo repartidas en distintas habitaciones. Al parecer, el joven de 26 años y nacionalidad colombiana habría tratado de calcinar algunas de las partes en la barbacoa, e incluso han aparecido trozos cocinados.

Los vecinos de la zona se muestran aterrados y aseguran que la misma noche de antes habían alertado un olor “nauseabundo” y un humo muy denso que provenía de la casa. Algunos se acercaron a preguntar qué pasaba y Leonardo justificó el humo y hedor diciendo que estaba haciendo una barbacoa y se le había quemado la carne. Nadie sospechaba lo que en realidad estaba haciendo el presunto asesino.

Tanto Leonardo como su expareja se encuentran actualmente en prisión. Él en la cárcel de Valdemoro y ella en Alcalá Meco. La jueza considera también la implicación de la joven como cómplice del crimen al haber encubierto el mismo durante unas horas y ayudarle a deshacerse de los restos.

La jornada de declaraciones se produjo el sábado y se prolongó desde las 10.00 de la mañana hasta pasadas las nueve de la noche dado que la jueza interrogó aparte de a los dos acusados a algunos testigos como los padres de la joven fallecida, la pareja sentimental de la madre, al hermano del principal acusado, a otra expareja sentimental del detenido y a varios vecinos.

A pesar de que en un primer momento Leonardo se acogió a su derecho de no declarar, hoy mismo ha confesado que la mató “por reírse de mi acento colombiano”. Se encuentra actualmente muy vigilado dentro de la prisión ya que se le ha aplicado e protocolo antisuicidio y se le ha asignado un preso de confianza para vigilarle.

El presunto asesino se autodenominaba a sí mismo como el “carnicero tatuador” en redes sociales, y según algunos testimonios de personas cercanas a él, sufría una esquizofrenia que había decidido no tratarse.

De momento se ignora la causa de la muerte, pero en la casa se encontraron diferentes cuchillos, catanas e incluso material para realizar ritos satánicos.