La Guardia Civil ha detenido a 11 hombres y 19 mujeres de un grupo afincado en Bulgaría, país al que mandaban los productos robados.
La Guardia Civil ha dado un duro golpe al clan búlgaro Cardarashi, un grupo de etnia gitana afincado en el norte del país que mandaba a sus miembros a España para robar a jóvenes durante distintas fiestas patronales. Los agentes han detenido a un total de 31 personas, 12 hombres y 19 mujeres -11 de ellas menores de edad y con el permiso de sus padres-, que habrían perpetrado 187 hurtos en Pinto, Tres Cantos, Las Rozas o Majadahonda, entre otras localidades.
La banda, que okupaba nueve pisos de entidades bancarias en Madrid, mandaba las mujeres rodear y “engatusar” a las víctimas, muchas de ellas ebrias, para quitarles objetos de valor como el móvil, el reloj o dinero. Tal y como han relatado los propios responsables de la operación, acompañados por la delegada del Gobierno de la capital Concepción Dancausa, se trataba de una “meticulosa” organización que enviaba todo el material robado a su país de origen por carretera, en tambores de persianas o en avión a través de las propias jóvenes.
Los 31 detenidos han sido puestos a disposición judicial y han sido acusados de delitos de pertenencia a organización criminal, hurto continuado y blanqueo de capitales, por lo que se les ha prohibido abandonar el país y tendrán que personarse en el juzgado semanalmente. Asimismo en los registros realizados se han requisado unos mil teléfonos, tarjetas, carteras, documentación, y más de 7.500 euros.
injerto | Viernes, 17 de Noviembre de 2017 a las 11:57:22 horas
Como siempre. Acusados de cometer muchos delitos y además probados y a su casa ocupada para que sigan delinquiendo, cuando salga el juicio a ver quién los localiza. Qué vergüenza de justicia¡. Lo que habría que hacer es expulsarles y prohibirles por siempre la entrada en España, so pena de cárcel perpetua y trabajos forzados. Entre tanto aquí en España, a seguir pariendo y creando parásitos chupadineros de todos, así como las ONGs van teniendo material sobre el que justificar algunas de sus actividades con verdaderos delincuentes y aprovechados. Es hora de aplicar la justicia con lógica y naturalidad y no con filosofías baratas.
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