Según Laura del Moral, “la revista municipal garantiza la transparencia en la gestión”

Respondiendo a la petición de colaboración para la mejora de la gestión municipal que les solicitó la concejalía de Recursos Humanos, la Asamblea de Trabajadores del Ayuntamiento de Pinto, reunida el 25 de febrero pasado, propuso al Gobierno municipal una reducción de dietas y cargos políticos y la supresión de la revista municipal “por su alto coste económico”. Sobre la reducción de dietas y cargos políticos, el Gobierno no se ha pronunciado, pero sí lo ha hecho sobre la supresión de la revista municipal a través de su portavoz, Laura del Moral.

Mediante una carta recibida el 1 de marzo por el “Presidente del Comité Único de Trabajadores, Antonio Alcázar” [que no es el presidente, sino el secretario], Laura del Moral manifiesta su rechazo a la petición de los trabajadores con respecto a la supresión de la revista municipal.

La carta

“…En ningún caso puedo compartir parte del contenido de su escrito -dice la concejala en su carta-. Informarle -añade- que la revista municipal es el nexo de unión del Ayuntamiento de Pinto con la ciudadanía, es el medio que garantiza que todos los ciudadanos estén informados, garantiza transparencia en la gestión, garantiza la participación de los vecinos en la vida activa del municipio, promueve la igualdad y además es una obligación de los gobiernos el informar a la ciudadanía. En este sentido decirles que como responsable de comunicaciones no comprendo el planteamiento de eliminar la revista municipal como medida de ahorro, además puedo asegurarle que la revista municipal es el medio más económico para informar a la ciudadanía ya que concentra mensualmente la información de todas las áreas evitando el desarrollo diario de folletos, dípticos, informas y otras publicaciones. Además en el departamento de prensa ejercen su labor de una manera ejemplar varios trabajadores de esta institución que dejarían de desempeñar parte del trabajo que realizan en el caso de tomar la decisión que ustedes plantean”.

Y concluye: “Con este escrito simplemente quiero manifestarle mi malestar por lo solicitado anteriormente. Me reitero en mi respeto a los Comités de trabajadores y a la lucha histórica y los avances conseguidos en materia de derechos laborales, por ello no he podido comprender algunas de sus propuestas en las que algunos de los trabajadores de  este ayuntamiento saldrían claramente perjudicados”.

Propaganda y despilfarro

Decir que la revista municipal “garantiza la transparencia en la gestión” es de un cinismo sin límites. La llamada revista municipal siempre ha sido en realidad una revista gubernamental al servicio del partido que gobierna y dirigida por un cargo de confianza de este partido, al que acompañan otros cargos de confianza afines. La misión principal de la revista gubernamental -ahora y antes- es ensalzar la gestión del partido gobernante, destacar sus éxitos, silenciar sus errores… y, últimamente, cubrir de lodo a la oposición. Que en el último ejemplar de esta revista se haya publicado a toda plana la imputación de las hermanas Rabaneda (PP) y no se haya publicado la sentencia condenatoria del primer teniente de alcalde, Reyes Maestre, por agresión a un menor, es una prueba grosera de que quien maneja el poder, maneja la propaganda municipal con descaro y sin vergüenza. Para los responsables de esta revista es más importante ser imputado (si se pertenece a la oposición) que ser condenado (si se pertenece al gobierno).

Que a esto Laura del Moral le llame “información” y “transparencia” produce nauseas. Como tampoco es cierto que esta revista “sea el medio más económico para informar a la ciudadanía”. Sin duda es el medio más económico para que el partido gobernante realice su propaganda, puesto que lo pagan todos los ciudadanos, pero para informar de la programación y de las actividades de interés público son suficientes 8 páginas (y no 52).

La palabra de Laura del Moral

Tienen razón los trabajadores: La revista gubernamental, en su actual formato, supone un enorme coste económico de más de 200.000 euros anuales para un Ayuntamiento en ruina.

Sin embargo, Laura del Moral les “asegura” que no, que eso no es así, pero del Moral ya “aseguró” al pueblo de Pinto en el Pleno del 22 de febrero de 2007 [entonces era concejala de Cooperación] sobre la cooperación con Pinto Argentina, que las 18 viviendas que allí se construyeron con dinero de los pinteños “fueron destinadas a personas especialmente necesitadas, a través de un sistema de adjudicación pública, donde se tuvieron en cuenta factores económicos y sociales”. Y como la oposición le decía que no, que eso no era cierto [y había numerosos testimonio e indicios en este sentido, muchos de ellos  incluso publicados por la revista ZIGZAG], Laura del Moral les respondió que “desde luego que de eso no encontrarán nada y, desde luego que por más que sigan buscando no lo encontrarán, porque no pueden encontrar lo que no existe. Eso sí, la verdad pondrá a cada uno en su lugar”.

Y no contenta con esto, remató en ese Pleno: “así que espero que al igual que hoy son capaces de decir las barbaridades que están diciendo, en un futuro próximo cuando todo se esclarezca sean también consecuentes y asuman sus responsabilidades políticas”. Responsabilidades que ella no ha asumido. Los culpables, como siempre, son otros. En este caso, los trabajadores municipales que piden cosas tan disparatadas para la Sra. del Moral como reducir dietas y cargos políticos y suprimir la revista gubernamental en su actual formato.