Carlos Donderis. Portero de balonmano

Carlos Donderis Vega, pinteño de  17 años recién cumplidos, alumno de 2º de Bachillerato en el IES Pablo  Picasso, ha sido convocado por la  Selección Española Promesa de  Balonmano para disputar las Olimpiadas Juveniles que tendrán lugar del 18 al 25 de julio en la ciudad finlandesa de Tampere. Tras su buena temporada defendiendo la portería del BM Pinto, Donderis ha fichado por el mejor equipo de la Comunidad de Madrid, el BM Alcobendas. Buen estudiante y deportista, destaca también por sus valores humanos. En 2007 fue el único pinteño que recibió el Premio al Juego Limpio en los Campeonatos Escolares que organiza la Comunidad de Madrid.

¿Te esperabas la llamada del combinado nacional?
Esperar, pues nunca te lo esperas. Lo que sí fue una sorpresa fue la llamada del año pasado a la preselección, éramos cuatro porteros y dos iban a ser los porteros del equipo nacional. Verme en la lista definitiva junto al otro portero que juega en el Ciudad Real y yo en el Pinto, pues llama la atención. Además, si ves la selección todos los jugadores vienen de equipos importantes: Barcelona, Valladolid, Ademar…

¿Cuál es tu objetivo en Finlandia con la selección española?
Ganar experiencia y amigos. Son los Juegos Olímpicos de juveniles, vas con el equipo español a la villa olímpica. En lo deportivo, espero tener una buena actuación porque he trabajado duro esta temporada para conseguir llegar a lo máximo y esto es un premio a todo el esfuerzo.

Con el BM Pinto has ido al Campeonato de España…
Representar a tu pueblo en un evento de tanta importancia como el Campeonato de España es un orgullo. Jugar en el equipo de tu pueblo es emotivo, además los colores siempre sientan mejor.

¿Con qué te quedas del Campeonato de España?
Con el último partido frente al Caja Sur Córdoba. Cierto que nos ganaron bastante fácil, porque tenían un equipo muy potente, pero luchamos hasta el final dando la cara en todo momento. No pasamos a la siguiente fase porque ellos eran mejor equipo, no porque nosotros no mostráramos nuestro nivel,  porque desde mi punto de vista creo que hicimos un grandísimo papel. 

 ¿Cómo compaginas la vida deportiva y la  estudiantil?
Este año he estado muy atado porque también tenía la Escuela de Idiomas, pero con sacrificio y esfuerzo todo se puede compaginar si te gusta realmente lo que haces.

¿Dejarías a tu familia por crecer deportivamente?
Me lo pensaría. Tendría que valorar muchos factores. Si voy allí qué pasaría… Tomaría la decisión más beneficiosa, siempre que me dejaran una opción para seguir con mis estudios, que para mí es lo primordial. Ante todo quiero sacarme una carrera, algo relacionado con las ciencias, una ingeniería o algo similar.

¿Hasta dónde crees que puedes llegar en el balonmano?
Todos soñamos con llegar a ser uno de los grandes, jugar en un equipo importante. Pero el problema del balonmano es que no se puede vivir de ello. Me gustaría verme en un equipo de primer nivel, ya no te digo un Barcelona o un Ciudad Real, sino un equipo competitivo. Con mi carrera y disfrutando del balonmano, pero sabiendo que si eso no sigue adelante tengo otras opciones de seguir con mi vida. Por supuesto, llegar a la selección española sería lo más y poder emular a mi ídolo, Hombrados.

¿La temporada que viene seguirás en el Pinto? 
No, jugaré en el Alcobendas. Ahora mismo en Madrid es el equipo más fuerte, el equipo referencia, el único que tiene Asobal. Sé que va a ser duro tener que desplazarme todos los días, pero merecerá la pena.

¿Cómo fueron tus primeros pasos en esto del balonmano? 
Cuando tenía 5 ó 6 años, mi hermano Edu, que todavía no era el presidente del BM Pinto, creó con un amigo un equipo de balonmano y me apunté. Primero jugamos en la liga escolar, luego se creó una escuela de balonmano en el colegio Santo Domingo. Si hay una persona que tiene mucha “culpa” de que yo esté aquí, ese es mi hermano Edu. Fue el que me ayudó a convencer a mis padres para poder ir a Leganés a jugar, cuando aquí desapareció el equipo.