La Ópera, un Vehículo de Aprendizaje (LÓVA) es un proyecto educativo centrado en el desarrollo emocional, social y cognitivo de los alumnos.
La ópera también puede ser un vehículo de aprendizaje, eso propone LÓVA (La Ópera, un Vehículo de Aprendizaje), un proyecto educativo impulsado desde el Teatro Real que abre el aula a este género musical, convirtiéndolo en una valiosa herramienta educativa. Un proyecto que han acogido 150 centros educativos, entre los que se encuentra Tercero de Infantil del colegio pinteño Calasanz.
Inés Martín y sus alumnos de cinco años han creado la compañía LEGO. “Elegimos ese nombre porque los ´legos´ [el juego] son muchas piezas separadas y todas juntas forman algo muy bonito”, explican los propios alumnos con timidez. Gracias a LÓVA, estos párvulos son ahora escritores de obra, regidores, técnicos de sonido e iluminación, músicos y actores. Desde octubre de 2014, la clase de Inés ha tenido que pintar escenarios, escribir una obra, inventar canciones y ensayar para que la Compañía LEGO estrene el próximo lunes 1 de junio en la Escuela Municipal de Música, a las 19.00 horas, un espectáculo que no dejará a nadie indiferente, una ópera enteramente original elaborada por niños.
Para convertirse en “profesionales” de la ópera, los alumnos del Calasanz han contado con clases magistrales, en las que han participado profesionales como el actor pinteño Samy Khalil o el profesor del centro y guionista de las premiadas obras en los certámenes de teatro de la Universidad Carlos III, Alfredo Castellanos.
El Calasanz lleva más de 25 años fomentando entre la comunidad escolar el arte del teatro, ahora, con LÓVA, suma a sus técnicas pedagógicas nuevas artes escénicas, descubriendo a sus aulas nuevas emociones y abriéndolas a la imaginación y el esfuerzo compartido.
mariam | Viernes, 29 de Mayo de 2015 a las 16:47:19 horas
Este planeta necesita personas como Inés, la mas niña de todos, con el brillo en los ojos que proporciona la ilusión por crecer con otros, por crecer juntos, por dejar crecer, por mirar y tratar a los niños con el respeto que merecen, por ser testigo de sus descubrimientos sin juzgar, porque tu trabajo crea esperanza en un mundo mejor.
Ojalá nuestro planeta tuviese mucho más de esto: maestros con inquietudes de niñ@, niñ@s maestros.
GRACIAS INÉS POR PELEARTE CON LA INERCIA, POR AYUDARNOS A COMPRENDER MEJOR, POR SER ESPERANZA!!
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